En virtud de este acuerdo, de cuatro años de vigencia, el Gobierno de Cantabria y los ayuntamientos, a través de la FMC, desarrollarán actividades conjuntas en materia medioambiental con el objetivo, tal y como explica Díaz Tezanos, de abordar "desde una gestión integral" estas zonas deterioradas e iniciar "un proceso de cambio en la manera de llevar a cabo la restauración ambiental".
La Estrategia de Recuperación de Áreas Degradadas permitirá, según la vicepresidenta, llevar a cabo acciones de restauración "con criterios claros, necesidades definidas y una metodología y seguimiento que haga posible que las áreas puestas en valor sean más sostenibles y perduren en el tiempo".
Por su parte, el presidente de la FMC ha señalado la importancia para los ayuntamientos del protocolo firmado hoy, ya que marca el inicio de la restauración de importantes áreas deterioradas de la región.
Diestro ha querido destacar la planificación que se ha llevado a cabo por parte del departamento que dirige Díaz Tezanos para establecer las prioridades, la ejecución y la financiación.
El presidente de la FMC ha destacado la "muy buena acogida" que está teniendo esta iniciativa por parte de los ayuntamientos, que éstos esperan "con impaciencia".
La Estrategia se basa en tres líneas fundamentales: la restauración racional de los ámbitos mediante la restitución ambiental o ecológica; la reutilización de áreas degradadas manteniendo y mejorando sus condiciones de uso o la rehabilitación de cada ámbito asignándoles nuevos usos que incorporen valores añadidos.
Este acuerdo permitirá también la puesta en marcha de programas de gestión ambiental para llevar a cabo una correcta planificación espacial y económica de las actuaciones de recuperación que se lleven a cabo en el marco de la estrategia. Asimismo, se prevé desarrollar un Sistema de información de Áreas Degradadas que permita el seguimiento y vigilancia de las acciones realizadas.
El Gobierno de Cantabria será el responsable de identificar las áreas y planificar las necesidades y prioridades en cada una; de articular los correspondientes mecanismos de financiación; desarrollar el SIAD; facilitar a la FMC la información y documentación que precise para llevar a cabo las acciones derivadas del protocolo y proporcionar ayuda técnica a los ayuntamientos que se adhieran y soliciten asesoramiento en la redacción de pliegos de prescripciones técnicas para la elaboración de Bases de Datos de Áreas Degradadas o de Planes de Recuperación de Áreas Degradadas.
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