El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha asegurado hoy que la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al segundo trimestre de 2015 confirma el "absoluto fracaso" del plan de empleo público financiado por el anterior Gobierno del Partido Popular con 28 millones de euros y que permitió la contratación de 4.000 personas por los ayuntamientos desde el pasado mes de febrero, por un periodo de seis meses que concluirá en agosto.
Tras analizar los datos difundidos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el presidente ha calificado como "muy mala" la evolución del mercado laboral en los tres últimos meses, ya que el descenso del paro en 1.400 personas "sólo ha sido posible por la caída de la población activa", que ha retrocedido en 1.600 trabajadores, ya que el número de ocupados se ha reducido en 300 trabajadores.
"Los 4.000 contratos realizados por los ayuntamientos no han tenido ninguna repercusión a efectos de la evolución del mercado laboral y ésa es la auténtica realidad que vive Cantabria y la herencia que recibe el nuevo Gobierno PRC-PSOE en materia de empleo", ha enfatizado.
Revilla se ha declarado "muy preocupado" por "la brecha" que distancia la evolución de la Comunidad Autónoma de la media de España, dado que a nivel nacional el paro ha retrocedido un 5,4 por ciento, "casi el doble", y el descenso cántabro ha sido el tercero más bajo.
Esa misma diferencia se mantiene en términos interanuales, porque en relación con el segundo trimestre de 2014 el paro cayó en Cantabria un 6,7 por ciento, mientras que en el conjunto del país el descenso fue del 8,4.
Para el presidente, la EPA conocida este jueves es "una buena fotografía" de lo que ha supuesto para Cantabria el mandato del PP durante los últimos cuatro años: "hoy tenemos casi 10.000 parados más, una tasa de paro 3,45 puntos superior y la población ocupada ha retrocedido en 9.900 personas, lo cual supone un balance realmente nefasto".
Con este punto de partida, ha reafirmado "la dificilísima" tarea que tiene por delante el nuevo Ejecutivo PRC-PSOE, cuyo reto más inmediato pasa por "paliar las terribles consecuencias sociales que se encuentran detrás de los datos de desempleo y que aún empeorarán en el corto plazo, con la finalización de los 4.000 contratos financiados con dinero público, que sólo han supuesto un alivio temporal para los beneficiarios, sin ninguna efectividad para la recuperación del empleo en la región".
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