Torrelavega: PP avisa que la ciudad perderá la subvención del Gobierno de Cantabria para suprimir el tapón de la calle Hermilio Alcalde del Río si la obra no empieza pronto

El Grupo Municipal del PP ha avisado del riesgo de perder la ayuda del Gobierno de Cantabria para suprimir el tapón de la calle Hermilio Alcalde del Río , “ si la obra no empieza pronto y PSOE y PRC siguen bloqueando la expropiación de la parcela que permite ensanchar y urbanizar el estrecho paso que comunica la avenida Menéndez Pelayo con la calle Pablo Garnica.
El concejal del PP, Alejandro Fernández Berjano recuerda que “ si esta obra, que ni siquiera ha salido a concurso público, no está finalizada antes del 31 de diciembre de 2015, Torrelavega perderá la ayuda del Gobierno de Cantabria que equivale al 80% de su coste, lo cual representa un nuevo revés para Torrelavega motivado por la inoperancia de los actuales dirigentes municipales”.
Berjano ha responsabilizado al concejal regionalista, Pedro García Carmona, de bloquear una obra que eliminaría un punto negro en pleno centro de la ciudad, completaría la red vial de Torrelavega en el casco urbano y convertiría esta zona degradada en una calle digna de nuestra ciudad”.
Además, ha asegurado que “las obras para suprimir este tapón en la calle Hermilio Alcalde del Río estarían ahora mismo en ejecución si no hubiera prosperado la moción de censura, y si el PRC y el PSOE no hubieran votado en diciembre de 2013 en contra de las expropiaciones informadas favorablemente por los servicios técnicos municipales”.
“Entonces actuaron por venganza política y para justificar la moción de censura- ha dicho Berjano- pero después de ocho meses gobernando Torrelavega sin hacer nada ya no valen excusas partidistas para seguir paralizando una inversión “necesaria y conveniente para la ciudad”.
El exalcalde de Torrelavega, Ildefonso Calderón consiguió para este proyecto la subvención del 80% de su coste por parte de la Consejería de Obras Públicas del Gobierno de Cantabria.
La actuación incluía el ensanche y acondicionamiento de la calzada que ahora está cerrada al tráfico de vehículos, la construcción de aceras y nuevas plazas de aparcamiento, iluminación y otras inversiones para la mejora de los servicios básicos.
El proyecto, valorado en 584.000 euros, incluía en este importe el coste de las expropiaciones de los terrenos necesarios para construir íntegramente el nuevo tramo de calle de unos cincuenta metros de longitud y terminar así con el tapón existente.
El equipo de gobierno presidido por Calderón consiguió llegar a un acuerdo con los propietarios para realiza una expropiación por valor de 359.000 euros y un convenio urbanístico con otro de los propietarios para compensar el coste la finca con la edificabilidad de la parcela, tal como permite el Plan General de Ordenación Urbana y sin coste económico para el Ayuntamiento.
Esta valoración económica fue aprobada por los técnicos municipales, pero PSOE y PRC votaron en contra de expropiación y desde entonces no han hecho nada por continuar con las gestiones para iniciar la obra.