El colectivo ha hecho esta petición en un manifiesto con motivo del Día Internacional de las Montañas, que se celebra este jueves, 11 de diciembre, una jornada en la que Salvar el Dobra quiere reivindicar Eel patrimonio natural, cultural y la excepcional biodiversiad" que acogen las cumbres y laderas de este monte.
Sin embargo, según la Plataforma este macizo se enfrenta a un futuro incierto. Compartido por tres municipios, cada uno de ellos parece concebirlo de manera distinta. En Torrelavega se está modificando el planeamiento para declarar como suelo de especial protección ecológica su territorio; en Puente Viesgo ha entrado en vigor su conceptuación como suelo rústico de montaña que puede destinarse a diversos usos (entre los que se encuentra el extractivo), y San Felices de Buelna tiene su Plan Urbanístico en Exposición Pública y contempla la mayor parte de su ámbito como suelo de “protección minera” -en realidad, preservado para esta actividad prioritariamente-.
Para la Plataforma, la Sierra del Dobra no puede trocearse en usos tan dispares como antagónicos. Necesita del acuerdo de la sociedad y las administraciones implicadas para que se establezca un régimen de usos que garantice su preservación desde la cohesión territorial. Y aquí no sólo los Ayuntamientos tienen que decir: también el Gobierno de Cantabria tiene competencias para declarar la figura de protección común a todo el macizo que se estime más adecuada para que no se dilapiden sus valores.
En el Día Internacional de las Montañas, la Plataforma Salvar el Dobra quiere hacer un llamamiento a los Ayuntamientos que comparten este espacio de montaña singular, particularmente a los de San Felices de Buelna y Puente Viesgo, así como a la Consejería competente del Gobierno de Cantabria, para que se conjuguen todos los esfuerzos necesarios que hagan posible una protección efectiva del Monte Dobra, coherente con la sostenibilidad de su uso y aprovechamiento, y libre de toda
posibilidad de incorporar nuevas actividades mineras y extractivas.
Para la Plataforma Salvar el Dobra resulta inconcebible que mientras algunos Ayuntamientos -el
de Torrelavega en concreto- están asumiendo compromisos firmes para garantizar una protección de la Sierra que garantice su aprovechamiento sostenible y preserve sus valores para disfrute de la sociedad, otros persistan en su expolio y destrucción facilitando la expansión de canteras y actividades extractivas con normativas urbanísticas tan reprobables como hechas a la medida de intereses privados sobradamente identificados.
En este sentido, desde la Plataforma quieren poner de manifiesto actitudes hipócritas como las del regidor de San Felices de Buelna y su equipo, que, mientras muestra en apariciones públicas su interés por la protección del Dobra, está consumando el aprovechamiento extractivo masivo al destinar toda la zona alta de la Sierra a este uso -salvo los exiguos enclaves obligatoriamente reservados para proteger los castros cántabros- en su Plan Urbanístico Municipal actualmente sometido a información pública.
Para la Plataforma tampoco es de recibo la actitud pasiva -en realidad tolerante con esta situación de amenaza que no remite- del Gobierno de Cantabria, que en sus “proyectos” para la Comarca contempla declaraciones tan pomposas como el llamado Plan Besaya 2020 o “Besaya Green Network” (sic), que se proponen como actuación estratégica la “formación de una red comarcal de espacios protegidos” o áreas de interés natural, donde la recuperación ambiental del Monte Dobra aparece como una prioridad dentro del “Anillo verde del Besaya”.
Lo que el Dobra demanda de un gobierno responsable y comprometido de verdad no son puestas en escena sino iniciativas y decisiones firmes, con medidas legislativas que tiene en su mano y hasta
ahora no ha querido, sabido o ambas cosas a la vez, adoptar.
Por otra parte, desde la Plataforma merece mención la actitud de la multinacional Lafarge que, lejos de asumir la ilegalidad de sus pretensiones (al menos en lo que al término municipal de Torrelavega respecta), tiene la osadía de presentarse en público -como ha hecho hace unos días- para vestir sus intenciones destructivas e intereses exclusivamente particulares como un ejercicio de filantropía y respeto a este entorno singular en una burda e impresentable escenificación. A estas alturas ¿a quién pretenden engañar?.
En este Día Internacional de las Montañas, desde la Plataforma quieren recordar que el Dobra también existe, y que es una auténtica vergüenza que uno de los mayores patrimonios naturales y
culturales de Cantabria siga a merced de expoliadores con el beneplácito de gobiernos municipales
serviles a intereses ajenos a la colectividad, y un gobierno regional que no pasa de meras declaraciones de intenciones mientras mira para otro lado.
El Dobra ha pagado ya un desmesurado tributo en forma de canteras, y su futuro y el de todos quienes vivimos en los valles que lo abrazan depende de la sensibilidad y preocupación por el interés
colectivo que nuestros gobernantes han de poner de manifiesto sin más demora.
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