Un grupo de vecinos de la Granja Poch reunidos hoy en asamblea han acordado exigir al Gobierno de Cantabria y al Ayuntamiento de Torrelavega la paralización cautelar e inmediata de las obras de una marquesina de nueve metros de largo con tres dársenas para autobuses que están actualmente en ejecución para atender este servicio en horario nocturno y han anunciado que iniciarán movilizaciones si no se paralizan de forma inmediata las obras.
Los vecinos han denunciado que estas obras se han iniciado por "sorpresa" sin que en ningún momento se haya consultado ni siquiera informado al casi un millar de residentes de nuestro barrio ni a los usuarios de la estación de autobuses.
Los vecinos creen que las obras les van a perjudicar por las noches con un tránsito continuo de autobuses y pasajeros. La consideran del todo innecesaria pues, a su juicio, supone un parche para no dotar convenientemente de personal (recuperando el vigilante de seguridad que había por las noches) en la estación de autobuses, aprovechando las dársenas existentes en el interior de dicha instalación.
Creen que la dársenas y la marquesina que se va a instalar es un despilfarro del dinero público (en torno a 60.000 euros) que podría ser utilizado para adecuar mejor la estación sin necesidad de ocupar más espacio en el exterior, perjudicando tanto a los vecinos como a los tres centros educativos del entorno.
Recuerdan los vecinos que esta obra pertenece al área de intervención urbanística M15, que se desarrolló mediante un estudio de detalle y cualquier modificación al respecto debe ser presentado a información pública, para que cualquier persona pueda alegar en tiempo y forma tal y como señala el PGOU.
Los vecinos quieren reunirse con los responsables de la Administración regional y local para buscar soluciones alternativas y advierten que en el caso de que antes de este viernes no se paralicen las obras, la semana que viene se volverán a reunir de nuevo en asamblea donde podrían decidir el inicio de movilizaciones.
Los vecinos creen que las obras les van a perjudicar por las noches con un tránsito continuo de autobuses y pasajeros. La consideran del todo innecesaria pues, a su juicio, supone un parche para no dotar convenientemente de personal (recuperando el vigilante de seguridad que había por las noches) en la estación de autobuses, aprovechando las dársenas existentes en el interior de dicha instalación.
Creen que la dársenas y la marquesina que se va a instalar es un despilfarro del dinero público (en torno a 60.000 euros) que podría ser utilizado para adecuar mejor la estación sin necesidad de ocupar más espacio en el exterior, perjudicando tanto a los vecinos como a los tres centros educativos del entorno.
Recuerdan los vecinos que esta obra pertenece al área de intervención urbanística M15, que se desarrolló mediante un estudio de detalle y cualquier modificación al respecto debe ser presentado a información pública, para que cualquier persona pueda alegar en tiempo y forma tal y como señala el PGOU.
Los vecinos quieren reunirse con los responsables de la Administración regional y local para buscar soluciones alternativas y advierten que en el caso de que antes de este viernes no se paralicen las obras, la semana que viene se volverán a reunir de nuevo en asamblea donde podrían decidir el inicio de movilizaciones.
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