Así, la región terminó con 38.506 personas sin trabajo, tras haberse reducido en 881 en diciembre respecto a noviembre (-2,24%).
La mayoría de los parados cántabros pertenecen al sector servicios /28.065). Le siguen de lejos los demandantes de empleo en la construcción (3.608) y en la industria (3-090), el colectivo sin trabajo anterior (3.062) y la agricultura (690).
De los más de 38.500 parados registrados en Cantabria al cierre de 2017, 20.988 eran mujeres y 17.548 hombres. De estos 35.887 eran mayores de 35 años y 2.619 menores de esa edad.
De los 3.747 parados extranjeros al finalizar 2017, 2.466 buscan trabajo en el sector servicios, 1255 en la agricultura y 151 en las industria y un total de 585 no han tenido empleo antes.
Cantabria cierra 2017 con la firma de 17.409 contratos (492 menos que al final de 2016), una subida del 2,91%. Casi el 94% de los contratos fueron temporales (16.377) frente a los 1.072 indefinidos.
El número de desempleados sin cobertura se situó en 20.167.
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