El presidente de Sniace, Blas Mezquita, cree que la empresa es "viable" y ha asegurado que el "objetivo" es la reapertura de la fábrica (si todo va bien podría ser en septiembre) para lo que la Dirección mantiene el plan de viabilidad que presentó el pasado mes de septiembre que conllevaba 91 despidos y 146 prejubilaciones (ahora todos pasan a ser despedidos), aunque incluyendo la información complementaria que han requerido los administradores concursales, que el 20 de febrero deberán emitir un preinforme en el que tomarán su decisión de si Sniace debe ir a la liquidación o puede tener futuro y el 6 de marzo deberán presentar un informe preliminar.
Así lo ha anunciado Mezquita al término de la reunión con el comité de empresa que comenzó a las 9.20 horas de la mañana y concluyó a las 12.00 horas, acudiendo posteriormente al Ayntamiento de Torrelavega donde tenía concertada una reunión con la nueva alcaldesa, Lidia Ruiz Salmón para hablar de la situación de la fábrica.
Ademas Mezquita explicó que la empresa tampoco reconoce los derechos de los trabajadores mayores de 55 años y dijo que si los asesores jurídicos de los sindicatos tienen una alternativa "que la pongan sobre la mesa".
Ademas Mezquita explicó que la empresa tampoco reconoce los derechos de los trabajadores mayores de 55 años y dijo que si los asesores jurídicos de los sindicatos tienen una alternativa "que la pongan sobre la mesa".
Mientras se celebraba esta reunión, 150 trabajadores de Sniace se han apostado en la portería donde han colocado neumáticos que tras terminar el encuentro han quemado y otro grupo, de unos 50, se han dirigido a la puerta principal donde también han amontonado neumáticos y los han prendido fuego, incendio que tuvo que ser apagado por los bomberos de la fábrica.
Sin embargo, las primeras palabras del presidente de la compañía han sido para agradecer las numerosas muestras de cariño recibidas por las gentes de Cantabria que han venido interesándose por la evolución de su enfermedad.
Para Mezquita y para el comité la reunión ha sido "fructífera". Ambas partes han puesto "mucho sentido común", conscientes de que en estos momentos existen 7, 8 o 9 problemas sobre la mesa y una serie de " incognitas" que afectan a la viabilidad de la planta, como el precio de la cogeneración.
Tanto el secretario del comité, Antonio Pérez Portilla como el presidente de Sniace, han avanzado que la empresa trabaja en tres planes de viabilidad diferenciado para rebrir sus tres fábricas, celulosa, viscocel-fibras y cogeneración, cómo así se lo han exigido los administradores concursales, pero con la complejidad añadida de que aún no se han despejado las dudas sobre la refoma energética y los permisos medioambientales.
Ambas partes se han referido también a la cita del 10 de febrero en la Audiencia Nacional (AN) donde este órgano deberá pronunciarse sobre la legalidad del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de extinción que conllevó el despido de toda la plantilla (533 trabajadores). En este momento sólo hay 33 trabajadores en la plantilla.
Tanto Mezquita como Pérez Portilla ha señalado la posibilidad de que este juicio se retrase o no se llegue a celebrar porque haya un "desestimiento" de sus promotores. Sin embargo, ambas partes van a seguir trabajando para que este juicio se retire y para ello volverán a reunirse el próximo lunes día 27 de enero. También está previsto un encuentro del comité con los administredores concursales el miércoles día 29 de enero.
Después vendrá una segunda fase como es intentar paralizar las 533 demandas por despido improcedente.
Finalmente, ambas partes han acordado "seguir tendiendo puentes", aunque estos se encuentren muy deteriorados. Todo está abierto y la empresa está dispuesta a "estudiar todo", han asegurado.
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