El Gobierno de Cantabria contará para los próximos cinco años con un Plan estratégico de protección civil para reforzar las herramientas de prevención de riesgos y de alertas a la población ante las catástrofes naturales, así como la gestión de los operativos y de las emergencias en la comunidad autónoma, tal y como ha adelantado la consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior, Paula Fernández Viaña, durante una rueda de prensa en la que ha estado acompañada por la directora general de Interior, Jezabel Morán.
El nuevo documento es "laborioso y muy completo" y establece las líneas estratégicas de acción para "alinear, integrar y priorizar los esfuerzos y los recursos" con el objetivo de "mitigar los efectos en las emergencias", cumpliendo el "compromiso" de establecer un plan de actuaciones hasta el año 2024 "en apenas seis meses", tras la aprobación de la Ley de Cantabria 3/2019, de 8 de abril, del Sistema de Protección Civil y Gestión de Emergencias de Cantabria.
Según ha concretado la consejera, el documento será aprobado esta semana por el Consejo de Gobierno y refleja "en futuro" los "compromisos" de mejora del sistema autonómico de protección civil, a través de los siete grupos de actuación de protección civil y emergencias: anticipación y sistemas de información y comunicación, prevención, planificación, coordinación, intervención, recuperación, y evaluación y control del sistema.
Dentro de estos grupos se despliegan 21 objetivos específicos y 95 acciones a ejecutar en los próximos cinco años. Entre estas medidas, se recoge la elaboración de un mapa de riesgos de la comunidad, incluyendo los de ámbito municipal; un sistema de alertas temprana para la población; planes educativos, junto a nuevos protocolos e instrumentos de planificación ante grandes emergencias.
A su juicio, con el centenar de acciones incluidas en el documento, el Gobierno cántabro aumentará "de forma efectiva" la capacidad de respuesta del sistema de protección civil con unos principios de actuación basados en "la solidaridad, colaboración, cooperación, coordinación, eficiencia, participación, inclusión y accesibilidad universal" para contar con un sistema autonómico de protección civil del "siglo XXI".
Dentro de las herramientas de anticipación, el Gobierno cántabro plantea completar una red de información de protección civil mediante varios instrumentos como el mapa de riesgos, un documento cartográfico que describe, analiza, califica y localiza cada uno de los riesgos relevantes de Cantabria, incluyendo los de ámbito municipal; un inventario de riesgos, un documento con las actividades de origen natural, antrópico o tecnológico susceptibles de generar riesgos para la integridad de los bienes y las personas, y un catálogo de actividades susceptibles de generar riesgo. En este último caso, se incluirán las actividades, centros e instalaciones susceptibles de generar grave riesgo.
Además del trabajo de diagnóstico y análisis de los riesgos, el Ejecutivo ha propuesto mejorar los sistemas de información, mediante una nueva red digital de comunicaciones destinada a los equipos de intervención como ya se prevé en los presupuestos para 2020, con una partida de 900.000 euros para esta red y 100.000 más para el mantenimiento de los repetidores.
Tal y como ha concretado Paula Fernández, en este ámbito se procede a dar un paso más en la integración del Centro de Atención de Emergencias 112 con el resto de centros de emergencias existentes en la Comunidad Autónoma a través del proyecto "Bus" para conectar "plenamente", de forma telemática, los expedientes de emergencias del SEMCA con los de la Policía Nacional y Guardia Civil, en una primera fase y, con el 061 y otros organismos, en una segunda fase.
Prevención, planificación y coordinación
La prevención se refuerza de forma "importante" en el plan estratégico dado que en los últimos años la sociedad se ha hecho más vulnerable a los desastres, incrementándose las pérdidas humanas y económicas, por lo que se incorporan nuevas medidas para mitigar los efectos. Entre las iniciativas, la consejera de Interior ha destacado un plan específico de acción en el ámbito educativo para fortalecer las políticas de educación, de información a la ciudadanía, y la autoprotección por lo que se establecerá un convenio de colaboración con la Consejería de Educación.
Además, Cantabria también apoya proyectos europeos como el caso del proyecto Assistance para favorecer el uso de la última tecnología en caso de desastres y situaciones de crisis tales como robots, enjambres de drones, técnicas de simulación computacional y entrenamientos avanzados.
Al margen de los planes especiales de protección civil con los que ya cuenta la Comunidad Autónoma y con el objetivo de "profundizar" en la planificación de la respuesta ante las grandes emergencias, Paula Fernández ha anunciado un nuevo plan especial de protección civil por riesgo de fenómenos meteorológicos adversos (Meteocant) y otro por riesgo de contaminación marítima (Contmarcant) para definir y coordinar mejor las actuaciones y los medios operativos involucrados, tanto a nivel privado como público, y bajo la premisa de mejorar los protocolos de actuación.
El cuarto grupo de actuación lo integran aquellas medidas tendentes a reforzar la coordinación tales como la formación conjunta entre servicios intervinientes, así como la redacción de nuevos protocolos operativos: lucha contra incendios forestales, incidentes en túneles de ferrocarril, rescates en cuevas y simas, así como la búsqueda de personas desaparecidas en el medio rural, en colaboración con la Guardia Civil.
En el ámbito de la coordinación, también se recoge un convenio de colaboración específico con la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) para mejorar la información que reciben los servicios de emergencia autonómicos, mediante informes específicos y adaptados en mayor medida a los riesgos del territorio, para anticiparse de mejor forma a las catástrofes, así como uno con el Colegio de Arquitectos para las intervenciones en las fases de recuperación y evaluación de daños.
Por otro lado, se implantarán estructuras estables de alerta temprana, a través de sistemas de vigilancia ambiental en tiempo real para acortar los tiempos de respuesta y el impacto hacia las personas, junto al envío de mensajes a la ciudadanía a través de aplicaciones avanzadas como My112.
Entre las acciones de mejora de la intervención de emergencias se incluye el nuevo servicio de operación del helicóptero medicalizado del Gobierno de Cantabria y, como novedad, Cantabria dispondrá de "un segundo helicóptero", durante los meses de diciembre a marzo, para reforzar la lucha contra los incendios forestales y posibles episodios de inundaciones en la época de mayores riesgos para el territorio, así como la atención de las emergencias. En 2020 se sacará a concurso el nuevo contrato del servicio del helicóptero autonómico por valor de 2,2 millones anuales.
En este ámbito, el Ejecutivo mantiene los convenios con los ayuntamientos que cuentan con parque de bomberos, importantes efectivos y medios para dar una adecuada cobertura a la atención de las emergencias en toda Cantabria.
Recuperación y evaluación del sistema
Dentro del grupo de recuperación también se potenciará la coordinación de actuaciones con las entidades locales y con la Administración del Estado en la tramitación de los procedimientos de ayudas para "el restablecimiento de la normalidad en las zonas siniestradas" y, como ejemplo, la consejera ha hecho alusión a los acontecimientos ocurridos en Campoo, con el refuerzo de los instrumentos de recuperación de las emergencias por el Gobierno de Cantabria.
Finalmente, en materia de evaluación y seguimiento, con el fin de analizar el funcionamiento del sistema autonómico de protección civil y completar el marco jurídico, Paula Fernández ha confirmado que el Ejecutivo aprobará un nuevo decreto sobre el registro autonómico de datos sobre emergencias y catástrofes, y un segundo para regular el servicio de inspección en el ámbito de protección civil, además de un convenio específico con CANTUR, dadas las características especiales de sus instalaciones, que reúnen de forma masiva y permanente a centenares de personas.
El nuevo documento es "laborioso y muy completo" y establece las líneas estratégicas de acción para "alinear, integrar y priorizar los esfuerzos y los recursos" con el objetivo de "mitigar los efectos en las emergencias", cumpliendo el "compromiso" de establecer un plan de actuaciones hasta el año 2024 "en apenas seis meses", tras la aprobación de la Ley de Cantabria 3/2019, de 8 de abril, del Sistema de Protección Civil y Gestión de Emergencias de Cantabria.
Según ha concretado la consejera, el documento será aprobado esta semana por el Consejo de Gobierno y refleja "en futuro" los "compromisos" de mejora del sistema autonómico de protección civil, a través de los siete grupos de actuación de protección civil y emergencias: anticipación y sistemas de información y comunicación, prevención, planificación, coordinación, intervención, recuperación, y evaluación y control del sistema.
Dentro de estos grupos se despliegan 21 objetivos específicos y 95 acciones a ejecutar en los próximos cinco años. Entre estas medidas, se recoge la elaboración de un mapa de riesgos de la comunidad, incluyendo los de ámbito municipal; un sistema de alertas temprana para la población; planes educativos, junto a nuevos protocolos e instrumentos de planificación ante grandes emergencias.
A su juicio, con el centenar de acciones incluidas en el documento, el Gobierno cántabro aumentará "de forma efectiva" la capacidad de respuesta del sistema de protección civil con unos principios de actuación basados en "la solidaridad, colaboración, cooperación, coordinación, eficiencia, participación, inclusión y accesibilidad universal" para contar con un sistema autonómico de protección civil del "siglo XXI".
Dentro de las herramientas de anticipación, el Gobierno cántabro plantea completar una red de información de protección civil mediante varios instrumentos como el mapa de riesgos, un documento cartográfico que describe, analiza, califica y localiza cada uno de los riesgos relevantes de Cantabria, incluyendo los de ámbito municipal; un inventario de riesgos, un documento con las actividades de origen natural, antrópico o tecnológico susceptibles de generar riesgos para la integridad de los bienes y las personas, y un catálogo de actividades susceptibles de generar riesgo. En este último caso, se incluirán las actividades, centros e instalaciones susceptibles de generar grave riesgo.
Además del trabajo de diagnóstico y análisis de los riesgos, el Ejecutivo ha propuesto mejorar los sistemas de información, mediante una nueva red digital de comunicaciones destinada a los equipos de intervención como ya se prevé en los presupuestos para 2020, con una partida de 900.000 euros para esta red y 100.000 más para el mantenimiento de los repetidores.
Tal y como ha concretado Paula Fernández, en este ámbito se procede a dar un paso más en la integración del Centro de Atención de Emergencias 112 con el resto de centros de emergencias existentes en la Comunidad Autónoma a través del proyecto "Bus" para conectar "plenamente", de forma telemática, los expedientes de emergencias del SEMCA con los de la Policía Nacional y Guardia Civil, en una primera fase y, con el 061 y otros organismos, en una segunda fase.
Prevención, planificación y coordinación
La prevención se refuerza de forma "importante" en el plan estratégico dado que en los últimos años la sociedad se ha hecho más vulnerable a los desastres, incrementándose las pérdidas humanas y económicas, por lo que se incorporan nuevas medidas para mitigar los efectos. Entre las iniciativas, la consejera de Interior ha destacado un plan específico de acción en el ámbito educativo para fortalecer las políticas de educación, de información a la ciudadanía, y la autoprotección por lo que se establecerá un convenio de colaboración con la Consejería de Educación.
Además, Cantabria también apoya proyectos europeos como el caso del proyecto Assistance para favorecer el uso de la última tecnología en caso de desastres y situaciones de crisis tales como robots, enjambres de drones, técnicas de simulación computacional y entrenamientos avanzados.
Al margen de los planes especiales de protección civil con los que ya cuenta la Comunidad Autónoma y con el objetivo de "profundizar" en la planificación de la respuesta ante las grandes emergencias, Paula Fernández ha anunciado un nuevo plan especial de protección civil por riesgo de fenómenos meteorológicos adversos (Meteocant) y otro por riesgo de contaminación marítima (Contmarcant) para definir y coordinar mejor las actuaciones y los medios operativos involucrados, tanto a nivel privado como público, y bajo la premisa de mejorar los protocolos de actuación.
El cuarto grupo de actuación lo integran aquellas medidas tendentes a reforzar la coordinación tales como la formación conjunta entre servicios intervinientes, así como la redacción de nuevos protocolos operativos: lucha contra incendios forestales, incidentes en túneles de ferrocarril, rescates en cuevas y simas, así como la búsqueda de personas desaparecidas en el medio rural, en colaboración con la Guardia Civil.
En el ámbito de la coordinación, también se recoge un convenio de colaboración específico con la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) para mejorar la información que reciben los servicios de emergencia autonómicos, mediante informes específicos y adaptados en mayor medida a los riesgos del territorio, para anticiparse de mejor forma a las catástrofes, así como uno con el Colegio de Arquitectos para las intervenciones en las fases de recuperación y evaluación de daños.
Por otro lado, se implantarán estructuras estables de alerta temprana, a través de sistemas de vigilancia ambiental en tiempo real para acortar los tiempos de respuesta y el impacto hacia las personas, junto al envío de mensajes a la ciudadanía a través de aplicaciones avanzadas como My112.
Entre las acciones de mejora de la intervención de emergencias se incluye el nuevo servicio de operación del helicóptero medicalizado del Gobierno de Cantabria y, como novedad, Cantabria dispondrá de "un segundo helicóptero", durante los meses de diciembre a marzo, para reforzar la lucha contra los incendios forestales y posibles episodios de inundaciones en la época de mayores riesgos para el territorio, así como la atención de las emergencias. En 2020 se sacará a concurso el nuevo contrato del servicio del helicóptero autonómico por valor de 2,2 millones anuales.
En este ámbito, el Ejecutivo mantiene los convenios con los ayuntamientos que cuentan con parque de bomberos, importantes efectivos y medios para dar una adecuada cobertura a la atención de las emergencias en toda Cantabria.
Recuperación y evaluación del sistema
Dentro del grupo de recuperación también se potenciará la coordinación de actuaciones con las entidades locales y con la Administración del Estado en la tramitación de los procedimientos de ayudas para "el restablecimiento de la normalidad en las zonas siniestradas" y, como ejemplo, la consejera ha hecho alusión a los acontecimientos ocurridos en Campoo, con el refuerzo de los instrumentos de recuperación de las emergencias por el Gobierno de Cantabria.
Finalmente, en materia de evaluación y seguimiento, con el fin de analizar el funcionamiento del sistema autonómico de protección civil y completar el marco jurídico, Paula Fernández ha confirmado que el Ejecutivo aprobará un nuevo decreto sobre el registro autonómico de datos sobre emergencias y catástrofes, y un segundo para regular el servicio de inspección en el ámbito de protección civil, además de un convenio específico con CANTUR, dadas las características especiales de sus instalaciones, que reúnen de forma masiva y permanente a centenares de personas.
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