Ecologistas en Acción cree que "ningún plan" hubiese avalado, por su ubicación, la planta de reciclaje de residuos de Celada Marlantes, cuya autorización ha anulado el Tribunal Supremo.
Así lo ha afirmado en un comunicado este grupo ecologista sobre la sentencia del Supremo que anula la autorización que en 2010 el Gobierno regional concedió a la empresa Residuos de Campoo (TERECAN) para construir esta planta al considerar que se otorgó sin estar aprobado el plan sectorial de residuos industriales, peligrosos y mineros, que es el que, según el Alto Tribunal, debía precisar los emplazamientos apropiados para este fin.
Ecologistas en Acción ha recordado que la planta iba a ubicarse en el extremo sur de la región, en una comarca donde se estimaba una generación de este tipo de residuos que representaba "sólo la décima parte del conjunto".
"Lo lógico es que este vertedero se ubicase en el triángulo entre Santander, comarca del Besaya y zona oriental, donde la Consejería de Medio Ambiente estima se generan el 80% del total", ha opinado.
Ecologistas en Acción, que junto con la Junta Vecinal de Fombellida, fue el que presentó el recurso que ha acabado con esta sentencia, ha señalado que, "afortunadamente", proyectos como este "no se han ejecutado por falta de viabilidad" y de "solvencia" de los promotores ya que ha avisado que, de lo contrario, el Gobierno regional "tendría que afrontar muy sustanciales indemnizaciones", detrayendo recursos públicos.
Por otra parte, ha advertido de que la situación de "inseguridad jurídica" sobre la instalación de vertederos en Cantabria persiste porque los planes vigentes "incumplían la obligación de fijar los lugares de eliminación".
Por ello, ha alertado de que "cualquier proyecto" en este sentido, como el del vertedero de Valderredible, está "condenado a seguir el mismo camino".
Así lo ha afirmado en un comunicado este grupo ecologista sobre la sentencia del Supremo que anula la autorización que en 2010 el Gobierno regional concedió a la empresa Residuos de Campoo (TERECAN) para construir esta planta al considerar que se otorgó sin estar aprobado el plan sectorial de residuos industriales, peligrosos y mineros, que es el que, según el Alto Tribunal, debía precisar los emplazamientos apropiados para este fin.
Ecologistas en Acción ha recordado que la planta iba a ubicarse en el extremo sur de la región, en una comarca donde se estimaba una generación de este tipo de residuos que representaba "sólo la décima parte del conjunto".
"Lo lógico es que este vertedero se ubicase en el triángulo entre Santander, comarca del Besaya y zona oriental, donde la Consejería de Medio Ambiente estima se generan el 80% del total", ha opinado.
Ecologistas en Acción, que junto con la Junta Vecinal de Fombellida, fue el que presentó el recurso que ha acabado con esta sentencia, ha señalado que, "afortunadamente", proyectos como este "no se han ejecutado por falta de viabilidad" y de "solvencia" de los promotores ya que ha avisado que, de lo contrario, el Gobierno regional "tendría que afrontar muy sustanciales indemnizaciones", detrayendo recursos públicos.
Por otra parte, ha advertido de que la situación de "inseguridad jurídica" sobre la instalación de vertederos en Cantabria persiste porque los planes vigentes "incumplían la obligación de fijar los lugares de eliminación".
Por ello, ha alertado de que "cualquier proyecto" en este sentido, como el del vertedero de Valderredible, está "condenado a seguir el mismo camino".
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