La consejera de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural, Blanca Martínez, ha presidido en Santibáñez la inauguración del nuevo centro de transformación de caseta y su línea subterránea de media tensión, así como el soterramiento de la red de baja tensión dentro de su núcleo urbano.
Para llevar a cabo esta doble actuación, cuyas obras han sido ejecutadas por la empresa E.ON Distribución, S.L. en base al convenio de colaboración que mantiene con el Gobierno de Cantabria para la electrificación rural, se ha realizado una inversión total de 173.568,50 euros. De ellos, 71.722,52 han sido financiados con fondos públicos procedentes del Gobierno de Cantabria, Administración General del Estado y Unión Europea, siendo aportado el resto por la empresa E.ON.
Junto con la consejera han estado presentes en el acto inaugural el director general de Infraestructuras de E.ON, Manuel Sánchez; la alcaldesa de Cabezón de la Sal, Esther Merino; el presidente de la Junta Vecinal de Carrejo y Santibáñez, Manuel González, y un numeroso grupo de vecinos.
La inauguración ha sido celebrada en Santibáñez con el lanzamiento de cohetes. En esta localidad la Junta Vecinal, que incluye las pedanías de Santibáñez y Carrejo, ha aprovechado las canalizaciones abiertas para el soterramiento de líneas eléctricas y, por su cuenta, ha acometido el soterramiento de otros servicios, como el alumbrado urbano y la telefonía, por la misma zanja, de manera que actualmente todo el núcleo urbano de Santibáñez ha quedado totalmente despejado de tendidos aéreos.
Blanca Martínez ha expresado la satisfacción que produce comprobar que, además de cumplir el compromiso de concluir la electrificación rural, asumido en el arranque de la presente legislatura, se van sentando las bases para acelerar la progresión que ha experimentado el desarrollo rural.
En opinión de la consejera, "la recuperación económica que, afortunadamente, se abre paso nos va a ayudar, sin duda, a acelerar ese proceso de dotar de infraestructuras a nuestros pueblos". Entre todos, ha dicho, debemos ser capaces de ir reduciendo los desequilibrios de las poblaciones rurales frente a los entornos urbanos. "Hasta ahora, vivir en el campo era sólo una opción. Pues bien, es necesario convertirlo también en una oportunidad".
Características de las obras
Por lo que respecta a las instalaciones de media tensión, 12,20 kv, se ha eliminado un centro de transformación de intemperie que estaba montado en aéreo sobre una torre metálica y, en su lugar, se ha instalado el nuevo centro de transformación de caseta prefabricada de hormigón, totalmente automatizado y radiocontrolado con telemando que, además, por su ubicación en un lugar céntrico del pueblo, resulta mucho más seguro para personas y bienes que el anterior. También se ha soterrado un tramo de línea aérea, habiéndose canalizado los cables por el interior de una zanja de 100 metros de longitud.
En cuanto a la red de baja tensión, han sido retirados todos los cables aéreos del núcleo urbano y se han construido 545 metros de zanja para canalizar la nueva red de baja tensión, así como otros 751 metros para las acometidas eléctricas a viviendas y locales.
Por lo que respecta a las instalaciones de media tensión, 12,20 kv, se ha eliminado un centro de transformación de intemperie que estaba montado en aéreo sobre una torre metálica y, en su lugar, se ha instalado el nuevo centro de transformación de caseta prefabricada de hormigón, totalmente automatizado y radiocontrolado con telemando que, además, por su ubicación en un lugar céntrico del pueblo, resulta mucho más seguro para personas y bienes que el anterior. También se ha soterrado un tramo de línea aérea, habiéndose canalizado los cables por el interior de una zanja de 100 metros de longitud.
En cuanto a la red de baja tensión, han sido retirados todos los cables aéreos del núcleo urbano y se han construido 545 metros de zanja para canalizar la nueva red de baja tensión, así como otros 751 metros para las acometidas eléctricas a viviendas y locales.
Paralelamente, se han desmontado los cables de las fachadas de los edificios junto con las cajas generales de protección y los contadores de corriente, que se han colocado en el interior de hornacinas de piedra. De esta forma, las instalaciones han quedado más protegidas y resultan mucho más seguras.
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