Así lo ha asegurado hoy el secretario general de la Federación de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego (FECOHT) de CC OO, Gregorio García, para quien esta sentencia, del pasado 23 de julio, “refuerza” la posición del sindicato de que “son los negociadores y no una disposición normativa los que deben decidir sobre el régimen de vigencia de las condiciones de trabajo”.
En este sentido, García ha explicado que la negociación del nuevo convenio de detallistas de alimentación “se retomará después del verano”, toda vez –ha dicho- que las reuniones mantenidas hasta la fecha con Aceda y Acoda, las dos patronales del sector, “se han cerrado sin ningún avance”.
Pese a ello, y tras recordar que este convenio afecta a unos 4.000 trabajadores de grandes cadenas de supermercados como Lupa, BM. El Árbol, Lidl, además de a todas las pequeñas tiendas de alimentación, pescaderías y carnicerías, el dirigente de CC OO, sindicato que junto a UGT ostenta el 75% de la representación sindical, ha reiterado su confianza en que “se pueda cerrar un nuevo convenio antes de fin de año”.
Con todo, ha advertido que si esto no fuera posible, los trabajadores “no perderían sus actuales derechos laborales” en aplicación de la citada sentencia de la Sala de lo Social de la Audiencia Nacional.
Y es que, en su opinión, esta sentencia “deja muy claro” que los convenios anteriores a la entrada en vigor de la reforma laboral de 2012 “siguen siendo vinculantes, aunque transcurra más de un año desde la finalización de la vigencia del último firmado”.
“Ahora lo que toca, y así lo va a hacer CC OO, es activar el proceso negociador para tratar de desbloquear la negociación colectiva y procedan tras el verano a la actualización contractual del convenio”, ha concluido.
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