La siniestralidad laboral se incrementó este año en Cantabria un 11,2% entre los meses de enero y septiembre en comparación al mismo período de 2014, tras acumularse un total de 11.065 accidentes, 1.111 más que los 9.954 de hace un año, según las últimas estadísticas oficiales del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo (ICASST), difundidas hoy en el acto de clausura de la jornada anual de salud laboral de UGT en Campoo.
Según aclaró la secretaria general de UGT en Cantabria, María Jesús Cedrún, que intervino en la clausura de la jornada junto con la directora general de Empleo del Gobierno regional, Ana Belén Álvarez, de esos 11.065 accidentes laborales registrados en lo que va de año, 4.284 fueron con baja, que aumentan un 5,7% con 232 más que en 2014; y los 6.781 restantes correspondieron a siniestros sin baja laboral, que repuntan casi un 15% con 879 más que el año pasado.
Como se precisó en la jornada de salud laboral que organiza desde hace 17 años UGT-Campoo, en los nueve primeros meses de 2015 seis trabajadores de la región han perdido la vida en su jornada laboral y otros dos en el desplazamiento a su centro de trabajo o “in itinere”.
Es el tercer año consecutivo que la siniestralidad laboral se incrementa en la región en estas fechas, tras cinco años anteriores de continuos descensos desde el inicio de la crisis económica, entre otros motivos, por la fuerte caída de la población ocupada de la región y la correspondiente reducción de trabajadores expuestos a los siniestros laborales.
Las estadísticas del ICASST aclaran al respecto que entre enero y septiembre del año 2008 se registraron en Cantabria 17.100 accidentes laborales, un año más tarde 14.703, en el mismo período de 2010 un total de 13.484, en 2011 hubo 12.354, y en 2012 y en 2013 se contabilizaron 10.555 y 9.466 siniestros respectivamente.
Nuevos subinspectores de prevención
En la jornada organizada por UGT-Campoo en La Casona de Reinosa, que este año tenía como principal cuestión de análisis la evolución de las evaluaciones de riesgo en los centros de trabajo, intervino el jefe de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Cantabria, Miguel Ángel Gálvez, que recordó la inminente creación de un cuerpo de subinspectores específico para la prevención de riesgos laborales.
Gálvez matizó que estos nuevos subinspectores de prevención de riesgos laborales implican “una significativa ampliación” de la actuación de la Inspección de Trabajo en la prevención de riesgos laborales como resultado de la nueva ley reguladora de la Inspección de Trabajo, que según el ponente, “también pretende solucionar los problemas de competencia entre las comunidades autónomas”.
El responsable regional de la Inspección de Trabajo aclaró que los subinspectores de prevención de riesgos laborales accederán a esta escala profesional con una titulación tanto científica como técnica y que a ella tendrán opción los propios técnicos de los institutos de seguridad y salud de las diferentes autonomías.
Además, Gálvez aludió a otra importante novedad de la nueva ley reguladora de la Inspección de Trabajo, que prevé la utilización directa de informes elaborados por la Guardia Civil o la policía en casos de siniestros laborales en virtud de la presunción de veracidad de estos cuerpos policiales.
Más allá del mero cumplimiento
En el encuentro técnico también participaron Ana Ruiz, subdirectora del Icasst, que sustituyó a última hora al responsable regional del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo, Amalio Sánchez; además de Carmen Escalada, jefa de Planificación y Programación de este organismo; y José Ignacio Valdés, jefe de Seguridad e Higiene de la mutua Asepeyo.
Según precisó Carmen Escalada en su ponencia, en la prevención de riesgos laborales “más allá del mero cumplimiento de la ley, el empresario debe de tener verdadero interés en proteger a sus trabajadores”.
De todos modos, en opinión de la subdirectora del ICASST, la propia Ley de Prevención de Riesgos Laborales española, que se implantó hace 20 años por imperativo de la entrada de España en la UE, “ha supuesto una mejora en la siniestralidad laboral y ha profundizado en el tratamiento de las enfermedades profesionales”.
Por último, José Ignacio Valdés analizó las evaluaciones de riesgo en las pequeñas empresas y el reciente Sistema de Prevención 10, un sistema de evaluación on-line para aquellos empresarios de pymes que pueden asumir las competencias de la evaluación de riesgo sin necesidad de requerir de una empresa especializada.
Según aclaró la secretaria general de UGT en Cantabria, María Jesús Cedrún, que intervino en la clausura de la jornada junto con la directora general de Empleo del Gobierno regional, Ana Belén Álvarez, de esos 11.065 accidentes laborales registrados en lo que va de año, 4.284 fueron con baja, que aumentan un 5,7% con 232 más que en 2014; y los 6.781 restantes correspondieron a siniestros sin baja laboral, que repuntan casi un 15% con 879 más que el año pasado.
Como se precisó en la jornada de salud laboral que organiza desde hace 17 años UGT-Campoo, en los nueve primeros meses de 2015 seis trabajadores de la región han perdido la vida en su jornada laboral y otros dos en el desplazamiento a su centro de trabajo o “in itinere”.
Es el tercer año consecutivo que la siniestralidad laboral se incrementa en la región en estas fechas, tras cinco años anteriores de continuos descensos desde el inicio de la crisis económica, entre otros motivos, por la fuerte caída de la población ocupada de la región y la correspondiente reducción de trabajadores expuestos a los siniestros laborales.
Las estadísticas del ICASST aclaran al respecto que entre enero y septiembre del año 2008 se registraron en Cantabria 17.100 accidentes laborales, un año más tarde 14.703, en el mismo período de 2010 un total de 13.484, en 2011 hubo 12.354, y en 2012 y en 2013 se contabilizaron 10.555 y 9.466 siniestros respectivamente.
Nuevos subinspectores de prevención
En la jornada organizada por UGT-Campoo en La Casona de Reinosa, que este año tenía como principal cuestión de análisis la evolución de las evaluaciones de riesgo en los centros de trabajo, intervino el jefe de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Cantabria, Miguel Ángel Gálvez, que recordó la inminente creación de un cuerpo de subinspectores específico para la prevención de riesgos laborales.
Gálvez matizó que estos nuevos subinspectores de prevención de riesgos laborales implican “una significativa ampliación” de la actuación de la Inspección de Trabajo en la prevención de riesgos laborales como resultado de la nueva ley reguladora de la Inspección de Trabajo, que según el ponente, “también pretende solucionar los problemas de competencia entre las comunidades autónomas”.
El responsable regional de la Inspección de Trabajo aclaró que los subinspectores de prevención de riesgos laborales accederán a esta escala profesional con una titulación tanto científica como técnica y que a ella tendrán opción los propios técnicos de los institutos de seguridad y salud de las diferentes autonomías.
Además, Gálvez aludió a otra importante novedad de la nueva ley reguladora de la Inspección de Trabajo, que prevé la utilización directa de informes elaborados por la Guardia Civil o la policía en casos de siniestros laborales en virtud de la presunción de veracidad de estos cuerpos policiales.
Más allá del mero cumplimiento
En el encuentro técnico también participaron Ana Ruiz, subdirectora del Icasst, que sustituyó a última hora al responsable regional del Instituto Cántabro de Seguridad y Salud en el Trabajo, Amalio Sánchez; además de Carmen Escalada, jefa de Planificación y Programación de este organismo; y José Ignacio Valdés, jefe de Seguridad e Higiene de la mutua Asepeyo.
Según precisó Carmen Escalada en su ponencia, en la prevención de riesgos laborales “más allá del mero cumplimiento de la ley, el empresario debe de tener verdadero interés en proteger a sus trabajadores”.
De todos modos, en opinión de la subdirectora del ICASST, la propia Ley de Prevención de Riesgos Laborales española, que se implantó hace 20 años por imperativo de la entrada de España en la UE, “ha supuesto una mejora en la siniestralidad laboral y ha profundizado en el tratamiento de las enfermedades profesionales”.
Por último, José Ignacio Valdés analizó las evaluaciones de riesgo en las pequeñas empresas y el reciente Sistema de Prevención 10, un sistema de evaluación on-line para aquellos empresarios de pymes que pueden asumir las competencias de la evaluación de riesgo sin necesidad de requerir de una empresa especializada.
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