El alcalde de Torrelavega, José Manuel Cruz Viadero, junto con la concejala de Bienestar Social, Patricia Portilla, ha explicado hoy en rueda de prensa el avanzado estado de tramitación del Plan de Emergencia Social, cuya propuesta inicial será presentada el próximo día 28 a la Comisión de Bienestar Social. Este Plan, fruto de un "estudio exhaustivo" sobre las necesidades del municipio en materia social, "se pondrá en marcha en coordinación con el Gobierno de Cantabria", según ha explicado Cruz Viadero.
En tanto se completa el documento de trabajo, con las aportaciones de los grupos políticos municipales, se van a poner en marcha, con carácter inmediato, una serie de medidas para tratar de paliar las consecuencias que padecen las personas y familias afectadas por la denominada "pobreza energética" que, según las estimaciones municipales podría afectar a un porcentaje de entre el 6% y el 8% de la población de Torrelavega.
Con este fin, se ha diseñado una línea de ayudas para contrarrestar estos efectos, que se recogen en una convocatoria de ayudas económicas para atender al pago de los suministros básicos de la vivienda, es decir, luz, agua y gas. Estas medidas serán presentadas asimismo en la comisión del próximo lunes, y se tramitarán, previa publicación en el BOC, de tal forma que los beneficiarios puedan percibir un 50% de las mismas en el próximo mes de enero.
El regidor municipal ha confirmado que "una de nuestras prioridades como equipo de gobierno" en esta legislatura es la cobertura social de las familias más necesitadas, a consecuencia de la crisis. Según Cruz Viadero, el objetivo de la medida es "que estas personas y familias económicamente y socialmente desfavorecidas no pasen frío este invierno".
Las ayudas se refieren al periodo de consumo comprendido entre noviembre de 2015 y abril de 2016, con una estimación de entre 450 y 500 familias que podrán beneficiarse de las mismas, y una consignación global de 100.000 euros. La cuantía máxima de la ayuda, por beneficiario, será de 40 euros mensuales (240 euros en todo el periodo señalado), y la forma de percibirlas, para los beneficiarios que reúnan los requisitos, será un 50% el próximo mes de enero, y el 50% restante en mayo de 2016.
La concejala de Bienestar Social ha recordado que la pobreza energética afecta a las familias que no pueden afrontar el pago de los suministros o bien dedican una parte excesiva de sus ingresos a este fin. Según Portilla, "el incremento de la brecha entre rentas y la pobreza laboral han contribuido a aumentar este problema".
Para elaborar esta línea de subvenciones se ha contado, según la concejala, con el refrendo de los técnicos municipales y de los diferentes colectivos y entidades que trabajan "a pie de calle" en el campo de la acción social.
En tanto se completa el documento de trabajo, con las aportaciones de los grupos políticos municipales, se van a poner en marcha, con carácter inmediato, una serie de medidas para tratar de paliar las consecuencias que padecen las personas y familias afectadas por la denominada "pobreza energética" que, según las estimaciones municipales podría afectar a un porcentaje de entre el 6% y el 8% de la población de Torrelavega.
Con este fin, se ha diseñado una línea de ayudas para contrarrestar estos efectos, que se recogen en una convocatoria de ayudas económicas para atender al pago de los suministros básicos de la vivienda, es decir, luz, agua y gas. Estas medidas serán presentadas asimismo en la comisión del próximo lunes, y se tramitarán, previa publicación en el BOC, de tal forma que los beneficiarios puedan percibir un 50% de las mismas en el próximo mes de enero.
El regidor municipal ha confirmado que "una de nuestras prioridades como equipo de gobierno" en esta legislatura es la cobertura social de las familias más necesitadas, a consecuencia de la crisis. Según Cruz Viadero, el objetivo de la medida es "que estas personas y familias económicamente y socialmente desfavorecidas no pasen frío este invierno".
Las ayudas se refieren al periodo de consumo comprendido entre noviembre de 2015 y abril de 2016, con una estimación de entre 450 y 500 familias que podrán beneficiarse de las mismas, y una consignación global de 100.000 euros. La cuantía máxima de la ayuda, por beneficiario, será de 40 euros mensuales (240 euros en todo el periodo señalado), y la forma de percibirlas, para los beneficiarios que reúnan los requisitos, será un 50% el próximo mes de enero, y el 50% restante en mayo de 2016.
La concejala de Bienestar Social ha recordado que la pobreza energética afecta a las familias que no pueden afrontar el pago de los suministros o bien dedican una parte excesiva de sus ingresos a este fin. Según Portilla, "el incremento de la brecha entre rentas y la pobreza laboral han contribuido a aumentar este problema".
Para elaborar esta línea de subvenciones se ha contado, según la concejala, con el refrendo de los técnicos municipales y de los diferentes colectivos y entidades que trabajan "a pie de calle" en el campo de la acción social.
Medida pionera en Cantabria
Se ha referido también la responsable municipal de Bienestar Social al "carácter innovador" de esta medida pionera en Cantabria, porque llevará aparejado un componente formativo, mediante asesoramiento a los beneficiarios sobre pautas de consumo, segu8imiento de los mismos y acceso al bono social. Además, estas ayudas serán compatibles con otras que los usuarios puedan recibir.
Patricia Portilla ha destacado también el esfuerzo que ha supuesto la formulación y desarrollo de esta medida, tanto como "la satisfacción que supone poder activar medidas que toquen tierra y nos van a hacer llegar a aquellos que más lo necesiten".
Las bases reguladoras para la concesión de estas ayudas serán presentadas el próximo lunes ante la comisión de Bienestar Social, para pasar después a Pleno y ser publicadas en el BOC, de tal modo que para finales de octubre o principios de noviembre se abriría el plazo de solicitudes, del que se realizará una amplia difusión desde el Ayuntamiento, con el objeto de "llegar al máximo número posible de beneficiarios", cuyas solicitudes serán valoradas según criterios económicos.
Se ha referido también la responsable municipal de Bienestar Social al "carácter innovador" de esta medida pionera en Cantabria, porque llevará aparejado un componente formativo, mediante asesoramiento a los beneficiarios sobre pautas de consumo, segu8imiento de los mismos y acceso al bono social. Además, estas ayudas serán compatibles con otras que los usuarios puedan recibir.
Patricia Portilla ha destacado también el esfuerzo que ha supuesto la formulación y desarrollo de esta medida, tanto como "la satisfacción que supone poder activar medidas que toquen tierra y nos van a hacer llegar a aquellos que más lo necesiten".
Las bases reguladoras para la concesión de estas ayudas serán presentadas el próximo lunes ante la comisión de Bienestar Social, para pasar después a Pleno y ser publicadas en el BOC, de tal modo que para finales de octubre o principios de noviembre se abriría el plazo de solicitudes, del que se realizará una amplia difusión desde el Ayuntamiento, con el objeto de "llegar al máximo número posible de beneficiarios", cuyas solicitudes serán valoradas según criterios económicos.
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