Tras una primera gestión por parte de los Servicios Sociales de la Mancomunidad de Municipios Altamira-Los Valles, de la que forma parte Santillana, y debido a la cantidad de objetos donados a la causa del evento celebrado, se ha establecido un canal de colaboración con la RSP como receptores, en este caso, de esos juguetes.
Este colectivo, que tiene sedes repartidas por toda España, también cuenta con varias delegaciones en Cantabria como es el caso de Camargo y el Valle del Saja. De hecho, la red sigue expandiéndose debido a la actualidad de carencias y necesidad de apoyo y ayuda que se demanda entre la población, por lo que desde la organización han explicado que está en proceso poder crear una red en esta zona del entorno de la Mancomunidad de Municipios Altamira-Los Valles y, de la comarca del Besaya, y facilitan la dirección de su página web para más información: http://www.reddesolidaridadpopular.org/red/cantabria
Entre sus objetivos, la RSP persigue, a través de la articulación de redes de solidaridad y de la auto-organización popular, dar respuesta a las necesidades más urgentes que sufren muchas personas en los entornos más cercanos. La Red de Solidaridad Popular promueve el mensaje de que las iniciativas son solidarias, por lo que en ningún momento revestirán carácter benéfico, ni asistencialista, ni caritativo, ya que serán puestas en marcha, conjuntamente, con las personas afectadas por las consecuencias de la crisis, partiendo de sus propias demandas y necesidades e implicándolas activamente en su diseño y gestión. Pretenden así, que toda iniciativa solidaria, ya sea una despensa solidaria o un banco de libros escolares, sea un proceso de aprendizaje colectivo que, a través de la implicación directa de sus destinatarios, contribuya a dotarles de habilidades y conocimientos para su auto-organización y empoderamiento, para que sea autosostenible y autogestionada por las personas y movimientos sociales implicados.
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