El entorno de la antigua finca del Asilo (se construirá en un futuro para residencia para discapacitados), donde concluye el tramo del bulevar radial, fue anoche el nuevo escenario elegido para los fuegos artificiales (una nueva normativa estatal que incrementa los requisitos en materia de seguridad obligó al Ayuntamiento a buscar este nuevo emplazamiento), actividad programada dentro de las fiestas de la Virgen Grande.
En concreto, la traca de fuegos artificiales se tiró desde la zona más elevada de esta finca unto al parque que se ha construido.
Los fuegos duraron 26 minutos, más tiempo que en otras ocasiones y fueron comtemplados por numerosos torrelaveguenses. Si bien al principio no parecían gran cosa y estaban causando un poco de decepción, luego tomaron fuerza y el final fue apoteósico. Se pudieron contemplar perfectamente en la propia rotonda
El dispositivo de seguridad organizado estuvo a la altura de las circunstancias y no se produjeron incidentes.
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