“Que los concejales socialistas y regionalistas festejen este trámite administrativo como si fuera un triunfo nos parece deleznable, porque nunca se tenía que haber llegado a la situación de tener que presentar un plan de recortes y ajustes con la herencia que les dejó el PP” afirma la concejala del popular, Natividad Fernández.
“Para nosotros no es ningún motivo de satisfacción, ni de orgullo, el visto bueno a cobrar más impuestos el año que viene, y a realizar menos inversiones, porque no va a ser nada bueno ni para la creación de empleo ni para el dinamismo en la economía local que genera el Ayuntamiento”.
“Nosotros no nos alegramos de que el Ayuntamiento vaya a recaudar un millón de euros más el año que viene vía IBI, haciendo pagar 68 euros más a cada familia por culpa de este plan”.
Y tampoco nos alegramos de que las inversiones vayan a caer un 48%, y del aplazamiento de varias obras públicas, o de la eliminación del Plan de Empleo que a bombo y platillo anunciaron socialistas y regionalistas hace doce meses”.
La concejala popular ha señalado que “lo realmente bueno y digno de celebrarse hubiera sido no tener que presentar este plan de saneamiento, no haber generado un déficit de 5 millones a mitad de año y no cerrar 2014 con un previsión de 2,4 millones en números rojos, como han hecho los actuales dirigentes municipales.
El PP valora el esfuerzo de los funcionarios municipales para cuadrar mínimamente las cuentas de este año, pero mantiene su firme censura a la gestión política de socialistas y regionalistas, que en estos doce meses de gobierno ha desguazado unas cuentas que el 2013 se saldaron con un remanente 4 millones de euros cuando gobernaba el PP.
Por lo tanto, la mera aceptación de estas medidas de saneamiento económico presentadas por el Ayuntamiento, son “exclusivamente una consecuencia del desgobierno posterior a la moción de censura y el fruto de la mala gestión de los actuales dirigentes municipales” concluye Fernández.
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