La Residencia Virgen de Valencia de Puente Arce iniciará la próxima semana un proyecto pionero en Cantabria que, bajo la denominación "Juguemos al ajedrez", tiene un doble objetivo: Por un lado, enseñar este juego a algunos de los residentes del centro, para que aprovechen sus beneficios en la prevención del deterioro cognitivo, y, por otro, potenciar relaciones y lazos de amistad con los alumnos de la Escuela Municipal de Ajedrez de Piélagos.
Así lo han explicado esta mañana los concejales de Servicios Sociales y de Deportes del Ayuntamiento de Piélagos, Eva Arranz y Carlos Caramés, respectivamente; la subdirectora de la Residencia, Encarna Otero; y los presidentes de las Federaciones Vasca y Cántabra de Ajedrez, Michel Muela y Miguel Ángel (Kakel) Muela. Precisamente de este último, también director de la Escuela de Ajedrez de Piélagos, surgió la idea de esta innovadora iniciativa.
“Llevo ya muchos años dándole vueltas a los beneficios del ajedrez y la necesidad de potenciar este deporte entre personas de todas las edades, así que en esta ocasión el Ayuntamiento nos puso en contacto con la Residencia Virgen de Valencia, que acogió de forma muy satisfactoria el proyecto, por lo que vamos a iniciarlo cuanto antes”, explica Kakel Muela, que será el encargado de dar las clases dos horas a la semana a los residentes seleccionados por los pedagogos del centro para iniciarse en el juego.
Además, el presidente de la Federación cántabra precisa que el objetivo es mucho más ambicioso que el simple aprendizaje de las reglas del ajedrez. “Queremos implicar a los alumnos de la Escuela Municipal de Ajedrez para que acudan al centro a jugar algunas partidas con los ancianos y nos gustaría también que éstos pudiesen ir a algún torneo, de forma que se establezcan lazos de compañerismo y de amistad entre ellos y se sientan respaldados por los chicos que comparten su misma afición”, añade Kakel Muela.
Por su parte, la subdirectora de la Residencia Virgen de Valencia señala que desde el centro se ha acogido con entusiasmo esta iniciativa aunque precisa que no está exenta de dificultad. “Tenemos 92 residentes, algunos con las facultades mentales muy deterioradas, y solo uno de ellos sabe jugar al ajedrez, por lo que vamos a seguir muy de cerca las indicaciones de los pedagogos, que estarán también en las clases para apoyar al profesor”, subraya Encarna Otero, recalcando, no obstante, que el proyecto “es muy positivo y muy beneficioso para ellos, dado que cuando se tiene una edad avanzada aprender algo nuevo ya es un gran aliciente”.
El Ayuntamiento de Piélagos apoya plenamente esta iniciativa y va a colaborar en todo lo posible para que salga adelante. “El ajedrez es un gran estimulador cerebral que colabora con la creación de nuevas conexiones neuronales”, señalan Eva Arranz y Carlos Caramés, “y estamos convencidos de que esta propuesta va a ser sumamente enriquecedora, no solo para los residentes sino también para los alumnos de la Escuela Municipal de Ajedrez, que podrán compartir con ellos nuevas experiencias”.
Finalmente, Michel Muela apunta que el ajedrez es un importante factor de prevención del deterioro cognitivo “porque favorece el análisis, el estudio racional de los problemas, mejora la capacidad de memoria a corto plazo, la toma de decisiones y el discernimiento lógico ya que es necesaria la capacidad de concentración, planificación y síntesis”.
Así lo han explicado esta mañana los concejales de Servicios Sociales y de Deportes del Ayuntamiento de Piélagos, Eva Arranz y Carlos Caramés, respectivamente; la subdirectora de la Residencia, Encarna Otero; y los presidentes de las Federaciones Vasca y Cántabra de Ajedrez, Michel Muela y Miguel Ángel (Kakel) Muela. Precisamente de este último, también director de la Escuela de Ajedrez de Piélagos, surgió la idea de esta innovadora iniciativa.
“Llevo ya muchos años dándole vueltas a los beneficios del ajedrez y la necesidad de potenciar este deporte entre personas de todas las edades, así que en esta ocasión el Ayuntamiento nos puso en contacto con la Residencia Virgen de Valencia, que acogió de forma muy satisfactoria el proyecto, por lo que vamos a iniciarlo cuanto antes”, explica Kakel Muela, que será el encargado de dar las clases dos horas a la semana a los residentes seleccionados por los pedagogos del centro para iniciarse en el juego.
Además, el presidente de la Federación cántabra precisa que el objetivo es mucho más ambicioso que el simple aprendizaje de las reglas del ajedrez. “Queremos implicar a los alumnos de la Escuela Municipal de Ajedrez para que acudan al centro a jugar algunas partidas con los ancianos y nos gustaría también que éstos pudiesen ir a algún torneo, de forma que se establezcan lazos de compañerismo y de amistad entre ellos y se sientan respaldados por los chicos que comparten su misma afición”, añade Kakel Muela.
Por su parte, la subdirectora de la Residencia Virgen de Valencia señala que desde el centro se ha acogido con entusiasmo esta iniciativa aunque precisa que no está exenta de dificultad. “Tenemos 92 residentes, algunos con las facultades mentales muy deterioradas, y solo uno de ellos sabe jugar al ajedrez, por lo que vamos a seguir muy de cerca las indicaciones de los pedagogos, que estarán también en las clases para apoyar al profesor”, subraya Encarna Otero, recalcando, no obstante, que el proyecto “es muy positivo y muy beneficioso para ellos, dado que cuando se tiene una edad avanzada aprender algo nuevo ya es un gran aliciente”.
El Ayuntamiento de Piélagos apoya plenamente esta iniciativa y va a colaborar en todo lo posible para que salga adelante. “El ajedrez es un gran estimulador cerebral que colabora con la creación de nuevas conexiones neuronales”, señalan Eva Arranz y Carlos Caramés, “y estamos convencidos de que esta propuesta va a ser sumamente enriquecedora, no solo para los residentes sino también para los alumnos de la Escuela Municipal de Ajedrez, que podrán compartir con ellos nuevas experiencias”.
Finalmente, Michel Muela apunta que el ajedrez es un importante factor de prevención del deterioro cognitivo “porque favorece el análisis, el estudio racional de los problemas, mejora la capacidad de memoria a corto plazo, la toma de decisiones y el discernimiento lógico ya que es necesaria la capacidad de concentración, planificación y síntesis”.
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