Todo un éxito fue la versión de Moliere de Don Juan que protagonizó por Espacio Espiral Teatro en la Casa de Los Escudos a la vista del numeroso público que asistió a la representación y el gran aplauso que al final de la obra recibieron sus actores, Don Juan Tenorio (interpretado por Miguel Meca), Sganarelle(César
Prada), el Señor Dimanche (Aitor Gabiola), Don Luis (Miguel Simón) y
Doña Elvira (Cristina Samaniego) y también sus músicos, el clave (Rodrigo Gandarillas), el violín (Luisa
Bahillo), y la flauta travesera (Marisa Gandarillas).
Una apuesta en escena basada en la “sencillez”, que duró 25 minutos y que se centró sobre todo en el trabajo
interpretativo de los actores y “no demasiado barroca”, además de que se
trató de “homenajear” al teatro francés en la ambientación, el
vestuario y el maquillaje.
Un don Juan de Molière que no quiso ser un drama, sino una comedia “crítica” y “satírica” que, encajó muy bien con los tiempos que corren..
Espiral Teatro ha elaborado una “actualización del mito” en la que se muestra al Don Juan a través de los personajes de su entorno con una visión “absolutamente crítica”, pero a la vez se muestran las ideas de que “tiene las cosas muy claras, es absolutamente libre en la toma de decisiones y no está sujeto a ningún código moral”.
Al finalizar el espectáculo, los espectadores se dirigieron al TMCE, ya que en el hall se instaló un ‘retablillo de Don Juan y Doña Inés’ para pedir sus “deseos de amor” y degustar una sopa de ajo y los “corazones de Don Juan”, unas pastas artesanas elaboradas para la ocasión.
Además, se colocó también un ‘photocall castellano’ donde el público pudo hacerse fotos con los actores.
Un don Juan de Molière que no quiso ser un drama, sino una comedia “crítica” y “satírica” que, encajó muy bien con los tiempos que corren..
Espiral Teatro ha elaborado una “actualización del mito” en la que se muestra al Don Juan a través de los personajes de su entorno con una visión “absolutamente crítica”, pero a la vez se muestran las ideas de que “tiene las cosas muy claras, es absolutamente libre en la toma de decisiones y no está sujeto a ningún código moral”.
Al finalizar el espectáculo, los espectadores se dirigieron al TMCE, ya que en el hall se instaló un ‘retablillo de Don Juan y Doña Inés’ para pedir sus “deseos de amor” y degustar una sopa de ajo y los “corazones de Don Juan”, unas pastas artesanas elaboradas para la ocasión.
Además, se colocó también un ‘photocall castellano’ donde el público pudo hacerse fotos con los actores.
Fotos: Cortesía Enrique Gutiérrez Aragón
No hay comentarios:
Publicar un comentario