Torrelavega: Torrelavega SÍ celebra que una sala de la Biblioteca Central de Cantabria se llame Aurelio García Cantalapiedra "Pity"

El Grupo Municipal de Torrelavega Sí quiere felicitar la sensibilidad de la Biblioteca Central de Cantabria que en su iniciativa de reordenar sus instalaciones para potenciar su sede como un espacio cultural ha decidido denominar una de sus salas, de manera definitiva, con el nombre de Aurelio García Cantalapiedra “Pity”.
Tal y como han dado a conocer los responsables de la Biblioteca Central de Cantabria, una ya vez finalizadas las labores de inventariado, todo el espacio de esta dotación ha sido objeto de una reordenación a resultas de la cual, la sala número 6 toma el nombre del editor, cronista, bibliógrafo y escritor torrelaveguense. 

De esta manera, la BCC rinde homenaje a un personaje imprescindible en la dinamización cultural a lo largo del siglo XX de la entonces provincia de Santander. Aurelio García Cantalapiedra, editor de la revista Peñalabra o del poemario Pido la Paz y la Palabra de Blas de Otero, amigo personal de José Hierro o Rafael Alberti había coleccionado a lo largo de los años un fondo documental de valor incalculable y que, en gran parte de las ocasiones, procedía de su relación directa con poetas, artistas, escritores, etcétera.
Torrelavega Sí, de otra parte, no puede sino lamentar el hecho que dichos fondos documentales, que tuvieron su origen y total desarrollo en nuestra ciudad, no hayan encontrado acomodo en el municipio, ya que, una vez más, el equipo de Gobierno ha vuelto a mostrarse absolutamente indolente en relación a nuestro patrimonio cultural. 

Una colección de documentos, libros, cartas y dibujos que cualquier ayuntamiento hubiera deseado para sí y que el nuestro ha dejado pasar de largo, como ya viene siendo habitual en su manera de proceder. Que las de obras de Pissano de la colección Lycois fueran cedidas la Gobierno de Cantabria o el estado de ruina del palacio Herreros, próximo ya al desplome, son buenos ejemplos de ello.
Torrelavega Sí, desde que se inició la legislatura, viene sugiriendo la adquisición de obras de nuestros artistas, como de todo aquello que pudiera ser patrimonio histórico, artístico o cultural, tangible o intangible, como la creación de un espacio para las Marzas en la radio.