viernes, 2 de junio de 2017

Santander: Real reitera que el consumo de tabaco genera enfermedad, sufrimiento y muerte y agrava las desigualdades sanitarias y socioeconómicas


El consumo del tabaco es el mayor problema de salud pública, ya que cada año mata a 6 millones de personas, cifra que superará los 8 millones en 2030 si no se intensifican las medidas para contrarrestarlo. El tabaco es perjudicial para cualquier persona, con independencia de su sexo, edad, o cualquier otro condicionante. Pero, aunque es "suficientemente conocido" que el tabaco provoca enfermedad, sufrimiento y muerte, se presta menos atención a que su consumo "empobrece a las personas y a las familias, incrementa la desigualdad social y debilita la economía de estados, ya que obliga a aumentar el gasto sanitario, reduce la productividad y genera grandes costes económicos".
Así es como la consejera de Sanidad; María Luisa Real, ha definido esta mañana una lacra sobre la que su departamento está insistiendo en concienciar. Apoyando las políticas de la Consejería de Sanidad en este ámbito, ha acompañado a María Luisa Real el presidente de la Red Europea de Prevención del Tabaquismo, Francisco Rodríguez Lozano, impulsor de la reforma de la Ley contra el tabaquismo "que situó a España a cabeza de los países europeos en el control de tabaquismo".
Juntos han presentado la campaña que el Gobierno de Cantabria ha lanzado con motivo del Día Mundial Sin Tabaco bajo el lema '¿sabes lo que fumas? ¿y lo que contaminas?' "que pretende llegar a toda la población con un mensaje diferente, que amplía la visión de la protección de la salud incluyendo la perspectiva de la protección del medio ambiente".
OMS: "El tabaco una amenaza para el desarrollo"
Una campaña que es complementaria a la que promueve cada año la OMS, para resaltar los perjuicios del tabaco y promover la consolidación de políticas eficaces que disminuyan su consumo. En esta edición el lema es 'El Tabaco, una amenaza para el desarrollo" ya que si de por sí agrava las desigualdades sanitarias y socioeconómicas en todo el mundo, es mucho más acusado en los países con ingresos más bajos, que han incrementado su consumo. Tal es así que "cerca del 80% de las muertes prematuras causadas por el consumo del tabaco se producen en países con bajos o medianos ingresos, que tienen dificultades para alcanzar los objetivos de desarrollo".
Consumir tabaco ¿ha insistido la consejera- alimenta un círculo vicioso que hace que los pobres sean aún más pobres al perder ingresos, reducir su productividad, enfermar y finalmente morir. A este gran problema se añade el medioambiental ya que la producción del tabaco ocasiona la contaminación del subsuelo, entre un 2 y 4% de la deforestación del planeta y 2 millones de toneladas de residuos sólidos.
De ahí que la OMS insta a los países para que prioricen la lucha contra el tabaco como una de las medidas más eficaces para lograr "de aquí a 2030 reducir en un tercio la mortalidad prematura por enfermedades no transmisibles en todo el mundo, incluidas las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica", ha añadido.
Los gobiernos, pero también la ciudadanía, deben contribuir a acabar con el tabaco "que en España aún tiene una prevalencia superior al 30% de la población activa". Para ello, se deben apoyar las políticas de control, respetando la legislación existente, y las políticas para dejar de fumar. De esta forma, mejorará la salud, la economía y el medio ambiente.
Desnormalizar la conducta de fumar
Por su parte, Fernández Lozano, uno de los artífices de la desnormalización de la conducta de fumar en nuestro país, ha insistido en que "la gran mayoría de la gente no fuma", porque lo normal es no fumar, pero la industria del tabaco se encarga de hacernos ver que sí y de intentar captar a posibles clientes, sobre todo entre la población joven.
"Europa se gasta cada año 25.000 millones de euros en tratar las enfermedades que produce el tabaco y en torno a unos 8.000 en costes derivados como el absentismo laboral", una cifra que ha calificado de excepcional para los sistemas sanitarios europeos "y que supone mucho más que lo que generan los impuestos del tabaco". En España, ha precisado, el consumo de tabaco produce 55.000 muertes al año.
Por eso, Fernández Lozano, aunque ha elogiado la labor que la Consejería de Sanidad realiza en Cantabria, echa en falta en nuestro país una campaña nacional de prevención del tabaquismo, "porque hace años que no se ve ninguna". Si para evitar los accidentes de tráfico, en los que mueren 1.800 personas al año en España, existen campañas excepcionales de prevención, no entiende cómo no las hay para prevenir el consumo de tabaco, que genera 55.000.
El presidente de la Red Europea ha señalado también que "aunque España estuvo a la cabeza en la prevención del consumo de tabaco con dos leyes pioneras, se ha quedado rezagado, ya que ni siquiera ha traspuesto la Directiva Europea al respecto, cuyo plazo expiró hace más de un año". De hecho, en los últimos años el consumo de tabaco se ha estancado, después del descenso que se produjo tras la aprobación de la Ley de 2010.
Algunos países europeos se han planteado muy en serio el fin del tabaquismo con políticas que restringen la accesibilidad del tabaco o lo hacen más difícil, sobre todo a la población joven. Y como ejemplo ilustrativo ha puesto el del precio del tabaco, que si en Canarias roza los 2 euros, 4 en la península, la misma cajetilla supera los 8 en el Reino Unido y los 16 en Australia, el país del mundo donde menos niños y jóvenes fuman.
Red Cántabra de Centros Sanitarios Sin Humo
Con la vista puesta en prevenir el consumo del tabaco y ayudar a los fumadores en su intento de dejar de fumar, en Cantabria se creó en el año 2015 la Red Cántabra de Centros Sanitarios Sin Humo, "aunque los profesionales sanitarios cántabros llevan muchos años en la primera línea de batalla fomentando buenos hábitos y ayudando a la deshabituación tabáquica", ha recordado la consejera. La Red está constituida por 16 centros, 13 centros de salud y tres hospitales.
En este último han año se han incorporado a la Red dos centros de salud (Cotolino I y II, de Castro Urdiales, y Dobra, en Torrelavega) y el primer hospital privado, el Hospital Ramón Negrete de la Mutua Montañesa, que hoy han recibido los distintos que avalan su pertenencia a la Red.
Además, durante un acto que ha tenido lugar en el Paraninfo de la Universidad de Cantabria (UC) se ha reconocido al centro de salud Puertochico y al Hospital de Laredo, miembros de la Red desde sus inicios, que hayan alcanzado el 'nivel bronce' según los estándares de la red global, que acredita su compromiso con los objetivos del proyecto.
Tras la entrega de distintivos, en la que han participado un centenar de profesionales sanitarios, Francisco Rodríguez Lozano, ha impartido una conferencia titulada 'El control del tabaquismo en España y Europa', en la que ha profundizado en las diferencias entre las políticas de prevención y la estrategia que, a su juicio, se debe seguir.

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