El equipo formado por Carlos Díaz y Roberto Rentería, a bordo de un BMW 318 E21 de 1981, ha logrado reeditar su triunfo absoluto de la pasada edición en la Clásica Valle de Piélagos, cita inaugural de la Copa de Clásicos de las Escuderías de Cantabria disputada el pasado sábado.
Finalmente, un total de 45 equipos, no sólo cántabros, sino llegados también desde otros puntos de la geografía española como Vizcaya, Guipúzcoa, Álava, Valladolid, Burgos o Asturias se dieron cita en la Bolera Municipal cubierta de Puente Arce.
Una vez más, la gran familia que conforma La Escudería Valle de Piélagos, con el apoyo del Ayuntamiento de Piélagos, la Junta Vecinal de Puente Arce, así como de numerosos patrocinadores y colaboradores, fue la encargada de sacar adelante una nueva entrega de su prueba, que tras una década contó tramos variados y entretenidos, zonas míticas y carreteras aptas para todos los clásicos como señas de identidad.
Elicegui y Pérez se llevaron el “Tramo Especial”
Después de disfrutar del animado ambiente habitual de las verificaciones administrativas y el briefing previo a la prueba con todos los apuntes importantes de última hora, los vehículos tomaron la salida de forma oficial a partir de las 13:00 horas desde la misma bolera y ante una gran expectación por parte de aficionados y público, en general.
A partir de ese momento, se disputó un tramo especial o tramo “00”, una especial plagada de navegación que supuso un bonito aliciente para la prueba, pero sin ser válida para la clasificación final.
En esta gymkhana Javier Elicegui logró junto a su copiloto Alberto Pérez ser el más preciso, seguido por la mínima de Javier Trueba-Antonio Portilla y de Joaquín Peña y Pablo Albo.
Diez tramos y diferentes modalidades de regularidad
A partir de aquí, se inició la primera sección propiamente dicha desde las instalaciones del Restaurante Oxford, colaborador de la prueba, a las 14:00 horas, momento a partir del cual y tras cinco horas de navegación por diferentes zonas de la región con un total de diez tramos, la Clásica regresó a la bolera con la llegada del primer equipo a las 20:15 horas.
En todo este trayecto, los participantes pudieron disfrutar de una excelente climatología y medirse con diferentes modalidades de regularidad propuestas por la organización.
Todo ello, a través de zonas tan especiales como Santillana del Mar, con paso por el casco histórico incluido; Sierra Elsa; Los Llares; Castillo Pedroso o Salcedo, así como por numerosos núcleos del propio municipio de Piélagos.
Carlos Díaz-subcampeón del apartado de pilotos 2016- y Roberto Rentería -campeón en título del apartado de copilotos- lograron una trabajada victoria, contabilizando 20,5 puntos tras 62 controles secretos de paso computados.
Tras esta pareja se clasificaron en segundo lugar Javier Elicegui y Alberto Pérez con 29,4 puntos sobre otro de los BMW E21 en liza, mientras que Joaquín Peña y Pablo Albo llevaron su habitual Ford Fiesta XR2 al tercer peldaño del podio con 36,4 puntos.
También destacó la gran prueba realizada por hombres como Bruno Filipe da Silva, José Mª Fuentevilla, Víctor Álvaro, Javier Trueba o Ángel Represa, batallando siempre por los primeros puestos.
Vencedores por categorías
Dentro de la categoría Open, Sergio y Ricardo Corrales refrendaron una vez más su buen hacer, logrando imponerse con el Ford Escort XR3i, seguidos en esta ocasión de Sergio Crespo con Jorge García con idéntico modelo.
Por su parte, el local Jesús Villegas no quiso perderse la prueba con su BMW 320i, logrando la tercera plaza junto a su copiloto Iván Pérez.
Por último, Luis García y Maite Urquiza ganaron en categoría Libre a bordo de un BMW 318 is, con Rodrigo Posada-Alberto Martínez segundos con Peugeot 205 GTI y Héctor Varela-Álvaro Moral con Opel Kadett Cabrio terceros.
Tras este animado inicio de temporada, ha comenzado la cuenta atrás para la segunda cita de la Copa de Clásicos de las Escuderías de Cantabria, en concreto la XI edición del Rallye Valle de Camargo que se celebrará el día 22 de abril y tendrá como punto neurálgico el Parque de Cros de Maliaño.
Finalmente, un total de 45 equipos, no sólo cántabros, sino llegados también desde otros puntos de la geografía española como Vizcaya, Guipúzcoa, Álava, Valladolid, Burgos o Asturias se dieron cita en la Bolera Municipal cubierta de Puente Arce.
Una vez más, la gran familia que conforma La Escudería Valle de Piélagos, con el apoyo del Ayuntamiento de Piélagos, la Junta Vecinal de Puente Arce, así como de numerosos patrocinadores y colaboradores, fue la encargada de sacar adelante una nueva entrega de su prueba, que tras una década contó tramos variados y entretenidos, zonas míticas y carreteras aptas para todos los clásicos como señas de identidad.
Elicegui y Pérez se llevaron el “Tramo Especial”
Después de disfrutar del animado ambiente habitual de las verificaciones administrativas y el briefing previo a la prueba con todos los apuntes importantes de última hora, los vehículos tomaron la salida de forma oficial a partir de las 13:00 horas desde la misma bolera y ante una gran expectación por parte de aficionados y público, en general.
A partir de ese momento, se disputó un tramo especial o tramo “00”, una especial plagada de navegación que supuso un bonito aliciente para la prueba, pero sin ser válida para la clasificación final.
En esta gymkhana Javier Elicegui logró junto a su copiloto Alberto Pérez ser el más preciso, seguido por la mínima de Javier Trueba-Antonio Portilla y de Joaquín Peña y Pablo Albo.
Diez tramos y diferentes modalidades de regularidad
A partir de aquí, se inició la primera sección propiamente dicha desde las instalaciones del Restaurante Oxford, colaborador de la prueba, a las 14:00 horas, momento a partir del cual y tras cinco horas de navegación por diferentes zonas de la región con un total de diez tramos, la Clásica regresó a la bolera con la llegada del primer equipo a las 20:15 horas.
En todo este trayecto, los participantes pudieron disfrutar de una excelente climatología y medirse con diferentes modalidades de regularidad propuestas por la organización.
Todo ello, a través de zonas tan especiales como Santillana del Mar, con paso por el casco histórico incluido; Sierra Elsa; Los Llares; Castillo Pedroso o Salcedo, así como por numerosos núcleos del propio municipio de Piélagos.
Carlos Díaz-subcampeón del apartado de pilotos 2016- y Roberto Rentería -campeón en título del apartado de copilotos- lograron una trabajada victoria, contabilizando 20,5 puntos tras 62 controles secretos de paso computados.
Tras esta pareja se clasificaron en segundo lugar Javier Elicegui y Alberto Pérez con 29,4 puntos sobre otro de los BMW E21 en liza, mientras que Joaquín Peña y Pablo Albo llevaron su habitual Ford Fiesta XR2 al tercer peldaño del podio con 36,4 puntos.
También destacó la gran prueba realizada por hombres como Bruno Filipe da Silva, José Mª Fuentevilla, Víctor Álvaro, Javier Trueba o Ángel Represa, batallando siempre por los primeros puestos.
Vencedores por categorías
Dentro de la categoría Open, Sergio y Ricardo Corrales refrendaron una vez más su buen hacer, logrando imponerse con el Ford Escort XR3i, seguidos en esta ocasión de Sergio Crespo con Jorge García con idéntico modelo.
Por su parte, el local Jesús Villegas no quiso perderse la prueba con su BMW 320i, logrando la tercera plaza junto a su copiloto Iván Pérez.
Por último, Luis García y Maite Urquiza ganaron en categoría Libre a bordo de un BMW 318 is, con Rodrigo Posada-Alberto Martínez segundos con Peugeot 205 GTI y Héctor Varela-Álvaro Moral con Opel Kadett Cabrio terceros.
Tras este animado inicio de temporada, ha comenzado la cuenta atrás para la segunda cita de la Copa de Clásicos de las Escuderías de Cantabria, en concreto la XI edición del Rallye Valle de Camargo que se celebrará el día 22 de abril y tendrá como punto neurálgico el Parque de Cros de Maliaño.
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