El Grupo Parlamentario Popular en el Congreso ha propuesto, mediante una Proposición no de Ley, un Plan Integral para eliminar la Brecha Digital en el ámbito educativo. Para ello, los populares plantean diez medidas concretas para acabar con dichas diferencias en el sector.
La diputada nacional por Cantabria y vicepresidenta de la Mesa de Educación y Formación Profesional, Elena Castillo, reclama garantizar que todo el alumnado tenga acceso a un ordenador o dispositivo para uso educativo; velar por el aprendizaje digital de los niños con discapacidad, migrantes, los que viven en centro de protección y niños gitanos; acompañar a las familias en el proceso formativo digital de la infancia; fomentar la participación de la sociedad civil; potenciar la investigación sobre el uso y acceso a las nuevas tecnologías de los niños y adolescentes con una perspectiva de equidad y adoptar medidas y programas para que toda la comunidad educativa haga un uso responsable y adecuado de los medios digitales.
También se pide que en un periodo no superior a tres años todo el profesorado obtenga el reconocimiento de la competencia digital docente; impulsar proyectos que favorezcan la innovación y la transformación tecnológica en el ámbito educativo; avanzar en la formación inicial y permanente de los docentes en educación digital que incluya la interacción de los profesores con los alumnos en el aprendizaje y desarrollar políticas de cooperación territorial.
Para Castillo, la crisis del COVID-19 ha puesto de manifiesto la desigualdad de medios tecnológicos de la población escolar, ya que muchas familias no disponen de ordenadores o dispositivos para realizar los trabajos escolares encomendados, ni de conexión a internet.
Por su parte, el diputado cántabro Diego Movellán destaca que hay casi 300.000 niños en España que no han usado un ordenador en los últimos tres meses y casi 140.000 que no han tenido ni un solo contacto con internet en el mismo periodo.
Ha señalado que durante la crisis del COVID-19, el Ministerio de Educación y Formación Profesional ha puesto a disposición de alumnos de Bachillerato y Formación Profesional 20.000 dispositivos móviles. Una cifra que solo supone un 1,3% de la cantidad total de alumnos de dichos niveles, totalmente insuficiente, de hecho hay muchos estudiantes en Cantabria que se encuentran todavía a la espera de recibir dichos dispositivos. La UNESCO ha alertado del posible incremento del abandono escolar como consecuencia del cierre prolongado de las escuelas.
La diputada nacional por Cantabria y vicepresidenta de la Mesa de Educación y Formación Profesional, Elena Castillo, reclama garantizar que todo el alumnado tenga acceso a un ordenador o dispositivo para uso educativo; velar por el aprendizaje digital de los niños con discapacidad, migrantes, los que viven en centro de protección y niños gitanos; acompañar a las familias en el proceso formativo digital de la infancia; fomentar la participación de la sociedad civil; potenciar la investigación sobre el uso y acceso a las nuevas tecnologías de los niños y adolescentes con una perspectiva de equidad y adoptar medidas y programas para que toda la comunidad educativa haga un uso responsable y adecuado de los medios digitales.
También se pide que en un periodo no superior a tres años todo el profesorado obtenga el reconocimiento de la competencia digital docente; impulsar proyectos que favorezcan la innovación y la transformación tecnológica en el ámbito educativo; avanzar en la formación inicial y permanente de los docentes en educación digital que incluya la interacción de los profesores con los alumnos en el aprendizaje y desarrollar políticas de cooperación territorial.
Para Castillo, la crisis del COVID-19 ha puesto de manifiesto la desigualdad de medios tecnológicos de la población escolar, ya que muchas familias no disponen de ordenadores o dispositivos para realizar los trabajos escolares encomendados, ni de conexión a internet.
Por su parte, el diputado cántabro Diego Movellán destaca que hay casi 300.000 niños en España que no han usado un ordenador en los últimos tres meses y casi 140.000 que no han tenido ni un solo contacto con internet en el mismo periodo.
Ha señalado que durante la crisis del COVID-19, el Ministerio de Educación y Formación Profesional ha puesto a disposición de alumnos de Bachillerato y Formación Profesional 20.000 dispositivos móviles. Una cifra que solo supone un 1,3% de la cantidad total de alumnos de dichos niveles, totalmente insuficiente, de hecho hay muchos estudiantes en Cantabria que se encuentran todavía a la espera de recibir dichos dispositivos. La UNESCO ha alertado del posible incremento del abandono escolar como consecuencia del cierre prolongado de las escuelas.
Por todo ello, el Grupo Popular urge que el Gobierno elabore un plan ambicioso con la participación de las administraciones autonómicas y agentes del sector tecnológico que garantice la equidad de nuestro sistema educativo y la calidad de la educación
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