La Junta de Personal Docente de Cantabria (UGT, STEC, ANPE, TU, CCOO y CSIF) ha criticado hoy que "se puede crear un entorno escolar mucho más seguro para toda la comunidad educativa" en el inicio del curso 2020-2021 en Cantabria pero que "el Gobierno no lo está haciendo" y no muestra "voluntad política para ello".
Según aclara la secretaria de Enseñanza de la Federación de Empleados de los Servicios Públicos (FeSP) de UGT, Laura Guate, "es evidente que no se han puesto todos los medios para conseguir un retorno mucho más seguro a los centros educativos y que incluso no se ha destinado a ello todo el dinero que en teoría correspondería a Cantabria por el Fondo Covid educativo aprobado el pasado mes de junio por un real decreto del Gobierno".
En este sentido, los sindicatos docentes coinciden en que la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria parece sólo preocuparse de los presupuestos y en "no incurrir en más gastos", aunque la responsable regional de Enseñanza de UGT insiste en que "habrá que preguntar a la consejera (Marina Lombó) en qué se ha gastado los fondos no reembolsables para afrontar la reanudación de la actividad educativa con la mayores garantías frente a la Covid-19".
Según la Junta de Personal Docente, en Cantabria se han contratado a más de 200 docentes para una reducción general de ratios (número de alumnos por cada aula y docente) que "es insuficiente" porque muchos centros de infantil y Primaria siguen sobrepasando los ratios recomendados por los expertos".
Los sindicatos agregan que "con esta contratación de algo más de 200 docentes, la Consejería de Educación sólo ha gastado la mitad del Fondo Covid que correspondería a Cantabria", por lo que advierten que "tendrá que dar explicaciones" sobre el destino final del resto del dinero.
Para la Junta de Personal Docente, "según los criterios de reparto de este fondo, en Cantabria habría una cuantía suficiente para cubrir las necesidades del profesorado".
PCR tardíos
Los sindicatos representativos de la docencia pública no universitaria de Cantabria lamentaron también que las medidas de protección individual para el profesorado "son claramente mejorables" y reprobaron a la Consejería de Educación que "las pruebas de PCR empiezan a llegar tarde porque se tenían que haber realizado en los últimos días de agosto".
"Lo mismo que otras empresas lo han realizado a sus trabajadores a la vuelta de las vacaciones, esta medida aseguraría un arranque seguro del curso, sabiendo que todos los docentes que estos días están permanentemente reunidos se encuentran sanos y que los propios órganos colegiados y de coordinación para preparar el inicio del curso no están siendo un foco de transmisión de la enfermedad", subraya la Junta de Personal Docente de Cantabria.
En relación a este último punto, los sindicatos docentes critican "la actitud impresentable" del consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, porque se negó a recibir y dar explicaciones de las medidas sanitarias previstas, tras recalcar que "debería asumir públicamente sus responsabilidades por no querer realizar pruebas PCR al profesorado antes de empezar las clases".
Además, la Junta de Personal Docente exigió mejorar los equipos de protección individual y generalizar la distribución de mascarillas de mayor protección (FFP2) y de pantallas faciales individuales a todos los niveles educativos.
Los sindicatos aclaran al respecto que las mascarillas FFP2 sólo se entregarán al profesorado de Educación Infantil pero reclaman que "se hagan extensivas al resto de etapas educativas (Primaria, ESO, Bachillerato o FP), a las que sólo se va a dotar de mascarillas ordinarias".
La Junta de Personal Docente que reitera su crítica a Educación por su falta de capacidad de diálogo y de llegar a acuerdos, además de su escasa iniciativa durante la pandemia y su "excesivo seguidismo a las directrices del Gobierno central", rechaza igualmente que no se hayan adoptado medidas especiales para el profesorado con patologías previas de riesgo.
Según aclara la secretaria de Enseñanza de la Federación de Empleados de los Servicios Públicos (FeSP) de UGT, Laura Guate, "es evidente que no se han puesto todos los medios para conseguir un retorno mucho más seguro a los centros educativos y que incluso no se ha destinado a ello todo el dinero que en teoría correspondería a Cantabria por el Fondo Covid educativo aprobado el pasado mes de junio por un real decreto del Gobierno".
En este sentido, los sindicatos docentes coinciden en que la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria parece sólo preocuparse de los presupuestos y en "no incurrir en más gastos", aunque la responsable regional de Enseñanza de UGT insiste en que "habrá que preguntar a la consejera (Marina Lombó) en qué se ha gastado los fondos no reembolsables para afrontar la reanudación de la actividad educativa con la mayores garantías frente a la Covid-19".
Según la Junta de Personal Docente, en Cantabria se han contratado a más de 200 docentes para una reducción general de ratios (número de alumnos por cada aula y docente) que "es insuficiente" porque muchos centros de infantil y Primaria siguen sobrepasando los ratios recomendados por los expertos".
Los sindicatos agregan que "con esta contratación de algo más de 200 docentes, la Consejería de Educación sólo ha gastado la mitad del Fondo Covid que correspondería a Cantabria", por lo que advierten que "tendrá que dar explicaciones" sobre el destino final del resto del dinero.
Para la Junta de Personal Docente, "según los criterios de reparto de este fondo, en Cantabria habría una cuantía suficiente para cubrir las necesidades del profesorado".
PCR tardíos
Los sindicatos representativos de la docencia pública no universitaria de Cantabria lamentaron también que las medidas de protección individual para el profesorado "son claramente mejorables" y reprobaron a la Consejería de Educación que "las pruebas de PCR empiezan a llegar tarde porque se tenían que haber realizado en los últimos días de agosto".
"Lo mismo que otras empresas lo han realizado a sus trabajadores a la vuelta de las vacaciones, esta medida aseguraría un arranque seguro del curso, sabiendo que todos los docentes que estos días están permanentemente reunidos se encuentran sanos y que los propios órganos colegiados y de coordinación para preparar el inicio del curso no están siendo un foco de transmisión de la enfermedad", subraya la Junta de Personal Docente de Cantabria.
En relación a este último punto, los sindicatos docentes critican "la actitud impresentable" del consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, porque se negó a recibir y dar explicaciones de las medidas sanitarias previstas, tras recalcar que "debería asumir públicamente sus responsabilidades por no querer realizar pruebas PCR al profesorado antes de empezar las clases".
Además, la Junta de Personal Docente exigió mejorar los equipos de protección individual y generalizar la distribución de mascarillas de mayor protección (FFP2) y de pantallas faciales individuales a todos los niveles educativos.
Los sindicatos aclaran al respecto que las mascarillas FFP2 sólo se entregarán al profesorado de Educación Infantil pero reclaman que "se hagan extensivas al resto de etapas educativas (Primaria, ESO, Bachillerato o FP), a las que sólo se va a dotar de mascarillas ordinarias".
La Junta de Personal Docente que reitera su crítica a Educación por su falta de capacidad de diálogo y de llegar a acuerdos, además de su escasa iniciativa durante la pandemia y su "excesivo seguidismo a las directrices del Gobierno central", rechaza igualmente que no se hayan adoptado medidas especiales para el profesorado con patologías previas de riesgo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario