El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha visitado el Centro de Visitantes del río Ebro, ubicado en Fontibre (Campoo de Suso) y ha destacado la labor educativa y dinamizadora que desarrollan los equipamientos de educación ambiental que hay repartidos por la región con sus actividades divulgativas de los espacios naturales protegidos de la Comunidad Autónoma.
Tras conocer sus instalaciones y reconocer la importante labor que realizan en beneficio del medio ambiente de Cantabria, Blanco ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que "en estos momentos en los que la naturaleza es garantía de seguridad ante el coronavirus practique actividades al aire libre, pero siempre desde la educación y la concienciación ambiental".
"En Cantabria tenemos una auténtica joya de patrimonio natural y si queremos seguir disfrutando de ella, tenemos que aportar nuestro granito de arena para garantizar su conservación y la de su biodiversidad y variados y ricos paisajes", ha advertido Blanco.
En este sentido, ha manifestado "la importante labor" que realizan los equipamientos de educación ambiental con el desarrollo de unos programas educativos que potencian las singularidades del medio ambiente y dinamizan el entorno rural en el que se ubican.
En su opinión, estos equipamientos cobran "más sentido si cabe" en estos tiempos de nueva normalidad, porque ofrecen "una atractiva propuesta ante la alta demanda de personas interesadas en realizar actividades en la naturaleza".
El titular de Medio Ambiente ha destacado el papel que tanto los centros de visitantes como los centros de interpretación realizan a la hora de implicar a los ciudadanos en el conocimiento y la mejora del medio ambiente.
De igual manera, ha destacado que resultan de "vital importancia" para generar dinámicas favorables en beneficio del desarrollo de las zonas rurales y contribuir a su dinamización económica y la lucha contra el despoblamiento.
En el caso del Centro de Visitantes de Fontibre, ha subrayado su contribución al crecimiento económico de Campoo de Suso y de toda la comarca campurriana como elemento dinamizador del patrimonio territorial, así como su labor divulgativa de la educación ambiental en Cantabria.
Finalmente, ha hecho un balance positivo de las buenas cifras de visitantes que están teniendo los equipamientos de educación ambiental desde que reanudaron su actividad el pasado 1 de julio, tras el parón obligado de casi tres meses como consecuencia de la propagación del coronavirus en Cantabria.
Un éxito que se debe, en parte, a que todas las actividades programadas se están desarrollando con todas las medidas de protección pautadas por las autoridades sanitarias gracias a los protocolos de seguridad y distanciamiento social que ha elaborado la Consejería de Medio Ambiente.
En la visita también han estado presentes, entre otros, el director general de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio; el director general del CIMA, Agustín Ibáñez, y el alcalde de Campoo de Suso, Pedro Luis Gutiérrez.
Centro de Visitantes del río Ebro
Gestionado por el Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), el Centro de Visitantes del río Ebro, ubicado en Fontibre (Campoo de Suso), aborda desde su privilegiada posición la historia y los usos del río Ebro y explica el origen de su nombre, además de su papel como escenario bélico.
También su navegación durante los siglos XVII y XIX, los paisajes de la cuenca, la cultura molinera, sus ferrerías y batanes, su uso como fuente de energía, sus puentes o su carácter industrial, entre otros contenidos.
Se trata de uno de los cinco centros de visitantes que gestiona el CIMA, junto al del Embalse del Ebro, ubicado en Corconte (Campoo de Yuso); Caminos de la Harina, en El Ventorrillo (Pesquera); La Piedra en Seco, en La Puente del Valle (Valderredible), y el de Monte Hijedo, en Riopanero (Valderredible).
Para poder visitar estos centros, los interesados pueden llamar al teléfono gratuito 900 649 009, y para participar en las rutas guiadas programadas deberán inscribirse previamente en el portal web del Plan PROVOCA (http://provoca.cantabria.es).
A estos cinco centros de visitantes hay que sumar los siete centros de interpretación que forman parte del Programa Naturea de la Red Cántabra de Desarrollo Rural: la Casa de la Naturaleza de Pesaguero sobre la Red Natura 2000 Liébana, en la localidad de Pesaguero; el del Parque Natural de Oyambre, situado en el faro Punta de la Silla en San Vicente de la Barquera, y el del Parque Natural Saja Besaya, en la localidad de Saja (Los Tojos).
También el Punto de Información de la Red Natura 2000 en los Valles Pasiegos, ubicado en la antigua estación de ferrocarril de Puente Viesgo; el Centro Ornitológico del Embalse del Ebro, en La Población (Campoo de Yuso); el Centro de Interpretación del Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel, en el puerto de Santoña, y el del Parque Natural Collados del Asón, en La Gándara de Soba.
Naturea complementa los centros de interpretación, con las actividades guiadas en áreas protegidas de su influencia cuyo calendario se puede consultar y realizar reservas, a través de www.natureacantabria.com.
Tras conocer sus instalaciones y reconocer la importante labor que realizan en beneficio del medio ambiente de Cantabria, Blanco ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que "en estos momentos en los que la naturaleza es garantía de seguridad ante el coronavirus practique actividades al aire libre, pero siempre desde la educación y la concienciación ambiental".
"En Cantabria tenemos una auténtica joya de patrimonio natural y si queremos seguir disfrutando de ella, tenemos que aportar nuestro granito de arena para garantizar su conservación y la de su biodiversidad y variados y ricos paisajes", ha advertido Blanco.
En este sentido, ha manifestado "la importante labor" que realizan los equipamientos de educación ambiental con el desarrollo de unos programas educativos que potencian las singularidades del medio ambiente y dinamizan el entorno rural en el que se ubican.
En su opinión, estos equipamientos cobran "más sentido si cabe" en estos tiempos de nueva normalidad, porque ofrecen "una atractiva propuesta ante la alta demanda de personas interesadas en realizar actividades en la naturaleza".
El titular de Medio Ambiente ha destacado el papel que tanto los centros de visitantes como los centros de interpretación realizan a la hora de implicar a los ciudadanos en el conocimiento y la mejora del medio ambiente.
De igual manera, ha destacado que resultan de "vital importancia" para generar dinámicas favorables en beneficio del desarrollo de las zonas rurales y contribuir a su dinamización económica y la lucha contra el despoblamiento.
En el caso del Centro de Visitantes de Fontibre, ha subrayado su contribución al crecimiento económico de Campoo de Suso y de toda la comarca campurriana como elemento dinamizador del patrimonio territorial, así como su labor divulgativa de la educación ambiental en Cantabria.
Finalmente, ha hecho un balance positivo de las buenas cifras de visitantes que están teniendo los equipamientos de educación ambiental desde que reanudaron su actividad el pasado 1 de julio, tras el parón obligado de casi tres meses como consecuencia de la propagación del coronavirus en Cantabria.
Un éxito que se debe, en parte, a que todas las actividades programadas se están desarrollando con todas las medidas de protección pautadas por las autoridades sanitarias gracias a los protocolos de seguridad y distanciamiento social que ha elaborado la Consejería de Medio Ambiente.
En la visita también han estado presentes, entre otros, el director general de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio; el director general del CIMA, Agustín Ibáñez, y el alcalde de Campoo de Suso, Pedro Luis Gutiérrez.
Centro de Visitantes del río Ebro
Gestionado por el Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA), el Centro de Visitantes del río Ebro, ubicado en Fontibre (Campoo de Suso), aborda desde su privilegiada posición la historia y los usos del río Ebro y explica el origen de su nombre, además de su papel como escenario bélico.
También su navegación durante los siglos XVII y XIX, los paisajes de la cuenca, la cultura molinera, sus ferrerías y batanes, su uso como fuente de energía, sus puentes o su carácter industrial, entre otros contenidos.
Se trata de uno de los cinco centros de visitantes que gestiona el CIMA, junto al del Embalse del Ebro, ubicado en Corconte (Campoo de Yuso); Caminos de la Harina, en El Ventorrillo (Pesquera); La Piedra en Seco, en La Puente del Valle (Valderredible), y el de Monte Hijedo, en Riopanero (Valderredible).
Para poder visitar estos centros, los interesados pueden llamar al teléfono gratuito 900 649 009, y para participar en las rutas guiadas programadas deberán inscribirse previamente en el portal web del Plan PROVOCA (http://provoca.cantabria.es).
A estos cinco centros de visitantes hay que sumar los siete centros de interpretación que forman parte del Programa Naturea de la Red Cántabra de Desarrollo Rural: la Casa de la Naturaleza de Pesaguero sobre la Red Natura 2000 Liébana, en la localidad de Pesaguero; el del Parque Natural de Oyambre, situado en el faro Punta de la Silla en San Vicente de la Barquera, y el del Parque Natural Saja Besaya, en la localidad de Saja (Los Tojos).
También el Punto de Información de la Red Natura 2000 en los Valles Pasiegos, ubicado en la antigua estación de ferrocarril de Puente Viesgo; el Centro Ornitológico del Embalse del Ebro, en La Población (Campoo de Yuso); el Centro de Interpretación del Parque Natural de las Marismas de Santoña, Victoria y Joyel, en el puerto de Santoña, y el del Parque Natural Collados del Asón, en La Gándara de Soba.
Naturea complementa los centros de interpretación, con las actividades guiadas en áreas protegidas de su influencia cuyo calendario se puede consultar y realizar reservas, a través de www.natureacantabria.com.
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