Desde la sección sindical de la Asociación de Policía Local de Cantabria (APLC) en Torrelavega, y tras la mala experiencia sufrida el año pasado, explican que de acuerdo con la Instrucción de Servicio recibida por los Agentes de Policía de Torrelavega relativa al horario y volumen de “Música, Megafonía y Ruidos”, provenientes de los puestos, atracciones y otras instalaciones ubicados en el recinto de las ferias de las fiestas de la Virgen Grande en 2016, las atracciones no podrán superar un nivel máximo de ruido de 90 decibelios hasta las 0:00 (Domingos y festivos hasta la 1:00) y 80 decibelios a partir de esa hora, los días 14, 15, 16 y 22 de agosto se permite cerrar como máximo a las 03:00 horas de la madrugada (suponemos que existe un error en estas últimas fechas, que se corresponden con las del año pasado, mientras que, por ejemplo, este año el día 22 es lunes laborable).
Según la APLC, la Organización Mundial de la Salud, para la emisión sonora en una zona donde predominen las viviendas, establece un límite de 60 dB para las horas del día y de 50 dB para la noche (23 a 7 h). El Real Decreto 1367/2007, de 19 de octubre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, establece para sectores del territorio con predominio de suelo de uso residencial un máximo 65 decibelios (dB), “límite a partir del cual el ruido se considera inaceptable”, estableciendo un limite de 55 dB durante la noche. La propia ordenanza de Torrelavega establece unos limites de ruido para Áreas urbanas y residenciales de 55 dB entre las 8 y las 22 horas y de 45 dB entre las 22 y las 8 horas. Por lo tanto resulta evidente que los citados volúmenes de ruido son incompatibles con la más minima tranquilidad y descanso.
Hasta 2014 los puestos y atracciones tenían la obligación de apagar la música y megafonía a partir de una hora concreta (0 h. los días laborables y 1 h. los festivos), y partir de 2015 se establecieron los citados limites de decibelios, lo que generó graves molestias a los residentes en la zona, y en algún caso conflictos muy serios entre los propios afectados y los responsables de los puestos y atracciones que podían haber acabado desgracia y que precisaron de intervención de Policía Local.
En la práctica, resulta obvio que alguno de los puestos y atracciones ni tan siquiera respetan los citados límites (ya de por si desproporcionados), sin que los policías locales dispongan de medios para poder controlar la emisión de ruido, circunstancia conocida y utilizada por los responsables de los puestos y carruseles ante los propios agentes, mediatizando por completo la intervención policial. Así, el resto feriantes, intentando captar la atención de los clientes, incrementen también el volumen de sus atracciones. De este modo, el ruido y las vibraciones que finalmente penetran en los domicilios cercanos, a altas horas de la madrugada, es insoportable.
Lo grave es que esta instrucción nace del propio Ayuntamiento, donde saben sobradamente que la Policía Local carece de medios para poder controlar el volumen de ruido y conocen perfectamente los problemas suscitados el año pasado. Además, durante años, los agentes de policía han confeccionado informes y denuncias sobre varios puestos que no respetaban ni las normas del recinto de ferias ni las normas más básicas de convivencia, observando como año tras año volvían a instalarse los mismos puestos, con los mismos responsables, y lo que es peor, con la misma actitud, sin que por parte del consistorio se haya adoptado medida alguna.
Los policías de Torrelavega seguirán acudiendo ante el requerimiento de los vecinos afectados con total profesionalidad, en el intento de mediar en los conflictos y contribuir al mantenimiento de una normal convivencia. Únicamente esperamos que los perjudicados entiendan que los agentes son tan paganos de esta situación como los propios residentes, ante lo que rogamos a los afectados que en lugar de enfocar su frustración sobre los policías se dirijan a nuestras autoridades municipales, verdaderos causantes del enredo que nos ha conducido a esta chapuza, y sobre los que recae la responsabilidad de buscar soluciones.
Finalmente, a la APLC le gustaría que desde el Equipo de Gobierno Municipal se respondiera alguna de las siguientes preguntas: ¿Algún técnico municipal tomó mediciones de ruido en el recinto de ferias durante las fiestas de 2015?, ¿es posible que algún miembro de la corporación municipal se encuentre detrás de aquellos puestos que causan molestias y que “tradicionalmente” abusan del volumen de música?, ¿dónde han ido a parar las denuncias e informes que los agentes han estado elaborando durante años?.
Según la APLC, la Organización Mundial de la Salud, para la emisión sonora en una zona donde predominen las viviendas, establece un límite de 60 dB para las horas del día y de 50 dB para la noche (23 a 7 h). El Real Decreto 1367/2007, de 19 de octubre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, establece para sectores del territorio con predominio de suelo de uso residencial un máximo 65 decibelios (dB), “límite a partir del cual el ruido se considera inaceptable”, estableciendo un limite de 55 dB durante la noche. La propia ordenanza de Torrelavega establece unos limites de ruido para Áreas urbanas y residenciales de 55 dB entre las 8 y las 22 horas y de 45 dB entre las 22 y las 8 horas. Por lo tanto resulta evidente que los citados volúmenes de ruido son incompatibles con la más minima tranquilidad y descanso.
Hasta 2014 los puestos y atracciones tenían la obligación de apagar la música y megafonía a partir de una hora concreta (0 h. los días laborables y 1 h. los festivos), y partir de 2015 se establecieron los citados limites de decibelios, lo que generó graves molestias a los residentes en la zona, y en algún caso conflictos muy serios entre los propios afectados y los responsables de los puestos y atracciones que podían haber acabado desgracia y que precisaron de intervención de Policía Local.
En la práctica, resulta obvio que alguno de los puestos y atracciones ni tan siquiera respetan los citados límites (ya de por si desproporcionados), sin que los policías locales dispongan de medios para poder controlar la emisión de ruido, circunstancia conocida y utilizada por los responsables de los puestos y carruseles ante los propios agentes, mediatizando por completo la intervención policial. Así, el resto feriantes, intentando captar la atención de los clientes, incrementen también el volumen de sus atracciones. De este modo, el ruido y las vibraciones que finalmente penetran en los domicilios cercanos, a altas horas de la madrugada, es insoportable.
Lo grave es que esta instrucción nace del propio Ayuntamiento, donde saben sobradamente que la Policía Local carece de medios para poder controlar el volumen de ruido y conocen perfectamente los problemas suscitados el año pasado. Además, durante años, los agentes de policía han confeccionado informes y denuncias sobre varios puestos que no respetaban ni las normas del recinto de ferias ni las normas más básicas de convivencia, observando como año tras año volvían a instalarse los mismos puestos, con los mismos responsables, y lo que es peor, con la misma actitud, sin que por parte del consistorio se haya adoptado medida alguna.
Los policías de Torrelavega seguirán acudiendo ante el requerimiento de los vecinos afectados con total profesionalidad, en el intento de mediar en los conflictos y contribuir al mantenimiento de una normal convivencia. Únicamente esperamos que los perjudicados entiendan que los agentes son tan paganos de esta situación como los propios residentes, ante lo que rogamos a los afectados que en lugar de enfocar su frustración sobre los policías se dirijan a nuestras autoridades municipales, verdaderos causantes del enredo que nos ha conducido a esta chapuza, y sobre los que recae la responsabilidad de buscar soluciones.
Finalmente, a la APLC le gustaría que desde el Equipo de Gobierno Municipal se respondiera alguna de las siguientes preguntas: ¿Algún técnico municipal tomó mediciones de ruido en el recinto de ferias durante las fiestas de 2015?, ¿es posible que algún miembro de la corporación municipal se encuentre detrás de aquellos puestos que causan molestias y que “tradicionalmente” abusan del volumen de música?, ¿dónde han ido a parar las denuncias e informes que los agentes han estado elaborando durante años?.
Asociación de Policía Local de Cantabria (APLC) en Torrelavega
Buenas noches.
ResponderEliminarSomos una empresa dedicada en exclusiva a la unificación y control acústico para zona de atracciones a nivel nacional , realizando este servicio con notable éxito en bastantes municipios y ferias de renombre desde hace 15 años.
Nuestra empresa ha ofrecido tal servicio al Excmo. Ayto. de Torrelavega en reiteradas ocasiones, sin éxito a la hora de contratar.
Esperamos este 2.017 el poder llegar a un acuerdo con el consistorio , y poder ir y solventar a Torrelavega tal problema que en mas de 50 poblaciones de nuestro pais ya es historia.