La Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) de UGT criticó hoy “la nueva improvisación chapucera” de la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria en la aplicación de la nueva ley educativa (LOMCE), por presentar a los docentes la primera evaluación individualizada del alumnado de 3º de Primaria “apenas 15 días antes de que se lleve a cabo y sin soluciones concretas a distintos problemas planteados por los propios profesores”.
“Una vez más, la Consejería de Educación actúa de forma imprudente y precipitada, reuniendo a los directores de los centros de Infantil y de Primaria poco antes de la fecha prevista para la evaluación, sin darles respuestas a los problemas que ellos mismos plantean y delegando en ellos toda la responsabilidad”, recalca la federación de Enseñanza de UGT.
FETE-UGT agrega que “hay alumnos que tienen adaptaciones curriculares significativas y distintos ritmos de aprendizaje que requieren de actuaciones específicas que la Consejería de Educación no ha concretado, lo cual no deja de ser criticable porque se supone que esta evaluación es un instrumento para valorar la mejora en la educación y conseguirla e implica un compromiso serio para que no se limite a un mero análisis puntual”.
Para el sindicato, “la evaluación en la educación obligatoria ha de ser formativa, diagnóstica, orientadora y continua con el fin de detectar los progresos y dificultades, analizar las causas y reconducir los ajustes; y para ello, nadie mejor que los docentes, que son los que mejor conocen a sus alumnos y los que mejor pueden evaluarlos”.
Más tiempo para los autistas
En este sentido, FETE-UGT reprocha a la Consejería de Educación del Ejecutivo Autónomo que “en lugar de implicarse y de hacer los deberes a tiempo, recurre una vez más a la improvisación y sale del paso con soluciones espontáneas y ridículas como, por ejemplo, la de plantear que para los alumnos autistas se amplíe la duración de la evaluación”.
“Parece mentira que la máxima autoridad educativa de Cantabria incluya en su decálogo para realizar la evaluación que los niños autistas dispongan de más tiempo como si esta medida fuera la única solución a sus problemas o que se proponga a los directores de los centros educativos que aconsejen a los alumnos llevar algún material didáctico que no haga ruido para que se entretengan si terminan pronto la prueba pero sin molestar a sus demás compañeros”.
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