Ayer fueron los títeres y hoy han sido las marionetas las que han vuelto a ser el elemento aglutinador de los más pequeños en la zona cubierta de la plaza de La Llama y han dado una ruidosa bienvenida a los muñecos de la Compañía de Maese Villarejo (Antonio Gómez Diaz de la Serna) que desde hace más de medio siglo acuden, año tras año, a estas fiestas patronales.
Su títere estrella es "Gorgorito", que es un "amante" se las "polkas" y se lleva una caja cuando se va. Un personaje que atrae mágicamente la felicidad. Y atrás no se quedan sus compañeros de fatigas que le hacen mucho rabiar en cada función.
Su actual "manipulador", Juan Díaz, hijo del inolvidable Maese, sigue la huella y el buen hacer de su padre que fue capaz de intuir que el teatro de títeres con caliudad e historias atractivas pueden ser seguidas por personas de cualquier edad, niños y adultos. Los mayores se vuelven niños.
Sus historias, perfeccionadas en el tiempo, siguen atrayendo cada vez más a un público fiel como el de Torrelavega y es una de las pricipales atracciones dentro del programa festivo. Mañana, miércoles, se celebrará una segunda función, a partir de las 12 del mediodía, en el mismo escenario.
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