El grupo parlamentario de Ciudadanos (Cs) Cantabria ha propuesto la creación de una línea de ayudas a autónomos y pymes para que puedan adaptar sus negocios a las exigencias sanitarias derivadas de la crisis del COVID-19. Entre las medidas que la formación naranja ha presentado ayer al Gobierno regional destaca una partida de 5.000.000 de euros para ayudas a fondo perdido, de las que podrían beneficiarse más de 2.000 negocios.
Para el diputado de Cs, Diego Marañón, es “urgente” que todos aquellos negocios que tienen un contacto cercano con los clientes “puedan ir adaptando sus locales para que, en cuanto se les permita el regreso a la actividad, puedan abrir con las máximas garantías: mamparas, equipos de protección, modificaciones en sus instalaciones para mantener el distanciamiento social, equipos de desinfección...”
Marañón ha insistido en que todos los “cambios obligados” por la nueva realidad “suponen un gasto imprescindible para reactivar la economía” y la apertura de negocios que muchos autónomos y pequeños empresarios “no pueden soportar”. Por eso, ha matizado, las ayudas a fondo perdido cubrirían el 50% de los gastos, con un límite máximo de 2.500 euros.
“El Gobierno debe ir más allá y realizar un plan ambicioso de ayudas directas para autónomos y pymes, que faciliten y amplíen la liquidez, de manera que puedan resistir la crisis económica derivada del coronavirus”, ha sentenciado Marañón.
Para el diputado de Cs, Diego Marañón, es “urgente” que todos aquellos negocios que tienen un contacto cercano con los clientes “puedan ir adaptando sus locales para que, en cuanto se les permita el regreso a la actividad, puedan abrir con las máximas garantías: mamparas, equipos de protección, modificaciones en sus instalaciones para mantener el distanciamiento social, equipos de desinfección...”
Marañón ha insistido en que todos los “cambios obligados” por la nueva realidad “suponen un gasto imprescindible para reactivar la economía” y la apertura de negocios que muchos autónomos y pequeños empresarios “no pueden soportar”. Por eso, ha matizado, las ayudas a fondo perdido cubrirían el 50% de los gastos, con un límite máximo de 2.500 euros.
“El Gobierno debe ir más allá y realizar un plan ambicioso de ayudas directas para autónomos y pymes, que faciliten y amplíen la liquidez, de manera que puedan resistir la crisis económica derivada del coronavirus”, ha sentenciado Marañón.
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