El consejero de Medio Rural, Pesca y Alimentación, Jesús Oria, ha destacado la "gran revolución" que se ha producido en los últimos años en el sector agroalimentario cántabro y su importancia para mantener la fisionomía regional y evitar el despoblamiento de las zonas rurales.
Así se ha expresado Oria durante la presentación del balance de 2018 de la Oficina de Calidad Alimentaria (ODECA), celebrado este viernes en el Hotel Bahía de Santander y en el que ha estado acompañado por la directora general de Pesca y Alimentación, Marta López, y el director de la ODECA, Fernando Mier.
El consejero ha asegurado el compromiso y el trabajo del Gobierno de Cantabria para consolidar una industria agroalimentaria moderna en la región, industria que en los últimos años se ha visto obligada a realizar un "notable esfuerzo" para adaptarse a los "profundos cambios" acontecidos en el sector.
El consejero ha subrayado que el desarrollo y la promoción de estas industrias, objetivos primordiales de la política de su Consejería, permitirá la "revalorización de las materias primas producidas en Cantabria" y el desarrollo económico de la región, principalmente en pequeños núcleos rurales, con la creación y consolidación de puestos de trabajo para evitar el despoblamiento rural y fomentar la racionalización de las producciones agrícolas y ganaderas.
En este sentido, ha subrayado la apuesta "clara y decidida" por la calidad como elemento estratégico para que, junto a la certificación, los productos cántabros puedan competir en unos mercados "cada vez más globalizados y exigentes".
Bajo estos aspectos, las actuaciones impulsadas a lo largo de este año desde la ODECA se han dirigido hacia la potenciación de los productos de calidad regionales sobre tres ejes de actuación.
El primero de ellos ha sido la vigilancia y el control de la calidad con la implantación de un plan de control específico para cada uno de los alimentos de calidad reconocidos en Europa, siguiendo las directrices generales establecidas en el Plan Nacional de Control de la Cadena Alimentaria, así como la Marca de Garantía 'CC-Calidad Controlada'. De esta manera, se han realizado más de 500 inspecciones a los diferentes operadores sometidos al sistema de calidad, que actualmente alcanza la cifra de 1.200, destacando la Indicación Geográfica 'Carne de Cantabria', con 488 operadores, y la Agricultura Ecológica, con 274.
En segundo lugar, Oria ha señalado el fomento de nuevas denominaciones como la solicitud de la IGP de la Anchoa del Cantábrico y los trabajos en otros sellos de calidad como las Patatas de Valderredible, las Corbatas de Unquera o la Quesada Pasiega.
Promoción alimentaria
El tercer eje vertebrador sobre el que la ODECA ha desarrollado su trabajo hace referencia a la promoción alimentaria, una actividad "necesaria para mejorar la comercialización de las producciones", según ha declarado el consejero. Y es que, según ha dicho, la limitada dimensión de la mayoría de las empresas hace "inviable" que individualmente puedan hacer frente a los costes de estas acciones, por lo que desde la Consejería se apoya su promoción y difusión mediante la asistencia a ferias y la realización de campañas de publicidad conjuntas con el objetivo de fomentar el consumo y el conocimiento de los productos.
En este sentido, el responsable de Medio Rural ha señalado la aportación de estos eventos para dar salida comercial al producto local y de proximidad, que cada vez tiene una mayor demanda y cuya adquisición ayuda a mantener intacta la fisonomía de la región, además de evitar el despoblamiento de los pueblos.
En concreto, la Oficina de Calidad Alimentaria ha participado en 52 ferias, 45 regionales, 6 nacionales y una a nivel internacional, con una inversión de 250.000 euros. En ellas se ha facilitado la presencia física de las empresas y se ha informado sobre las características de los productos alimentarios de Cantabria.
Otra medida promocional ha sido el desarrollo de campañas publicitarias con el objetivo de informar a los consumidores sobre los productos de calidad que cuentan con un sello de calidad específica de la Unión Europea, como son las Denominaciones de Origen, las Indicaciones Geográficas y la Agricultura Ecológica, así como aquellos que cuentan con la etiqueta de la Comunidad Autónoma 'CC Calidad Controlada'. Asimismo, estas iniciativas, que han supuesto una inversión de más de 130.000 euros, han servido para apoyar a los productores cántabros que se encuentran adheridos a estos esquemas de certificación.
Por último, Jesús Oria ha destacado el número de seguidores alcanzado en redes sociales, que supera la cifra de 11.000 euros, y ha felicitado a las empresas agroalimentarias de Cantabria, "los principales protagonistas de este trabajo", cuyo esfuerzo y dinamismo están consiguiendo "ponernos en el mapa de la Calidad Alimentaria", tal y como demuestran los premios conseguidos por más de 20 empresas en este 2018, la mayor parte internacionales.
Así se ha expresado Oria durante la presentación del balance de 2018 de la Oficina de Calidad Alimentaria (ODECA), celebrado este viernes en el Hotel Bahía de Santander y en el que ha estado acompañado por la directora general de Pesca y Alimentación, Marta López, y el director de la ODECA, Fernando Mier.
El consejero ha asegurado el compromiso y el trabajo del Gobierno de Cantabria para consolidar una industria agroalimentaria moderna en la región, industria que en los últimos años se ha visto obligada a realizar un "notable esfuerzo" para adaptarse a los "profundos cambios" acontecidos en el sector.
El consejero ha subrayado que el desarrollo y la promoción de estas industrias, objetivos primordiales de la política de su Consejería, permitirá la "revalorización de las materias primas producidas en Cantabria" y el desarrollo económico de la región, principalmente en pequeños núcleos rurales, con la creación y consolidación de puestos de trabajo para evitar el despoblamiento rural y fomentar la racionalización de las producciones agrícolas y ganaderas.
En este sentido, ha subrayado la apuesta "clara y decidida" por la calidad como elemento estratégico para que, junto a la certificación, los productos cántabros puedan competir en unos mercados "cada vez más globalizados y exigentes".
Bajo estos aspectos, las actuaciones impulsadas a lo largo de este año desde la ODECA se han dirigido hacia la potenciación de los productos de calidad regionales sobre tres ejes de actuación.
El primero de ellos ha sido la vigilancia y el control de la calidad con la implantación de un plan de control específico para cada uno de los alimentos de calidad reconocidos en Europa, siguiendo las directrices generales establecidas en el Plan Nacional de Control de la Cadena Alimentaria, así como la Marca de Garantía 'CC-Calidad Controlada'. De esta manera, se han realizado más de 500 inspecciones a los diferentes operadores sometidos al sistema de calidad, que actualmente alcanza la cifra de 1.200, destacando la Indicación Geográfica 'Carne de Cantabria', con 488 operadores, y la Agricultura Ecológica, con 274.
En segundo lugar, Oria ha señalado el fomento de nuevas denominaciones como la solicitud de la IGP de la Anchoa del Cantábrico y los trabajos en otros sellos de calidad como las Patatas de Valderredible, las Corbatas de Unquera o la Quesada Pasiega.
Promoción alimentaria
El tercer eje vertebrador sobre el que la ODECA ha desarrollado su trabajo hace referencia a la promoción alimentaria, una actividad "necesaria para mejorar la comercialización de las producciones", según ha declarado el consejero. Y es que, según ha dicho, la limitada dimensión de la mayoría de las empresas hace "inviable" que individualmente puedan hacer frente a los costes de estas acciones, por lo que desde la Consejería se apoya su promoción y difusión mediante la asistencia a ferias y la realización de campañas de publicidad conjuntas con el objetivo de fomentar el consumo y el conocimiento de los productos.
En este sentido, el responsable de Medio Rural ha señalado la aportación de estos eventos para dar salida comercial al producto local y de proximidad, que cada vez tiene una mayor demanda y cuya adquisición ayuda a mantener intacta la fisonomía de la región, además de evitar el despoblamiento de los pueblos.
En concreto, la Oficina de Calidad Alimentaria ha participado en 52 ferias, 45 regionales, 6 nacionales y una a nivel internacional, con una inversión de 250.000 euros. En ellas se ha facilitado la presencia física de las empresas y se ha informado sobre las características de los productos alimentarios de Cantabria.
Otra medida promocional ha sido el desarrollo de campañas publicitarias con el objetivo de informar a los consumidores sobre los productos de calidad que cuentan con un sello de calidad específica de la Unión Europea, como son las Denominaciones de Origen, las Indicaciones Geográficas y la Agricultura Ecológica, así como aquellos que cuentan con la etiqueta de la Comunidad Autónoma 'CC Calidad Controlada'. Asimismo, estas iniciativas, que han supuesto una inversión de más de 130.000 euros, han servido para apoyar a los productores cántabros que se encuentran adheridos a estos esquemas de certificación.
Por último, Jesús Oria ha destacado el número de seguidores alcanzado en redes sociales, que supera la cifra de 11.000 euros, y ha felicitado a las empresas agroalimentarias de Cantabria, "los principales protagonistas de este trabajo", cuyo esfuerzo y dinamismo están consiguiendo "ponernos en el mapa de la Calidad Alimentaria", tal y como demuestran los premios conseguidos por más de 20 empresas en este 2018, la mayor parte internacionales.
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