El Gobierno de Cantabria, a través de la Consejería de Obras Públicas y Vivienda, ha instalado una pasarela peatonal provisional para solucionar el problema de acceso que estaban sufriendo los vecinos de San Felices y Los Corrales de Buelna debido a las obras de construcción del nuevo Puente de Ranero.
De este modo, la nueva infraestructura, que según ha anunciado el consejero de Obras Públicas y Vivienda, José María Mazón, podría estar operativa este miércoles a primera hora, permitirá que los vecinos de ambos municipios puedan acceder a los núcleos urbanos de manera "directa".
El titular de Obras Públicas ha mostrado su satisfacción por dar solución a un problema mayor del que en un principio se pensaba y por cumplir el compromiso que adquirió el Gobierno de Cantabria con todos los vecinos pues, aunque ha habido algún "pequeño" retraso por cuestiones técnicas, lo principal es "garantizar la seguridad" de los peatones realizando una estructura "sólida y adecuada".
En el momento de la visita, el consejero ha estado acompañado por los alcaldes de ambos municipios, José Antonio González Linares y Josefa González, respectivamente, quienes han agradecido la disposición de la Consejería por buscar una solución "rápida y eficaz" para los vecinos de la zona, y por cumplir con el compromiso que se adquirió con los dos ayuntamientos.
Durante el acto también han estado presentes el director general de Obras Públicas, José Luis Gochicoa, técnicos de la Consejería y miembros de la Corporación municipal de ambos municipios.
Nueva estructura
Para que la nueva infraestructura, situada en la CA-170 (Corrales de Buelna), pueda contar con las totales garantía de seguridad se está llevando a cabo la sustitución del antiguo puente por uno nuevo de 60 metros de longitud y dos carriles con una anchura 3,25 metros cada uno, que incluyen también dos aceras de más de 2 metros a cada lado.
En total, serán 12 metros de plataforma para agilizar el tráfico en un punto que sufre a diario un tráfico muy elevado, donde se incluyen un elevado número de vehículos pesados debido a la conexión con los polígonos industriales de Barros y de la recta de La Agüera.
El proyecto también incluye nueva señalización vertical y horizontal de la carretera, reponiéndose todos los cierres de aquellas parcelas que se hayan visto afectadas por las obras.
De este modo, la nueva infraestructura, que según ha anunciado el consejero de Obras Públicas y Vivienda, José María Mazón, podría estar operativa este miércoles a primera hora, permitirá que los vecinos de ambos municipios puedan acceder a los núcleos urbanos de manera "directa".
El titular de Obras Públicas ha mostrado su satisfacción por dar solución a un problema mayor del que en un principio se pensaba y por cumplir el compromiso que adquirió el Gobierno de Cantabria con todos los vecinos pues, aunque ha habido algún "pequeño" retraso por cuestiones técnicas, lo principal es "garantizar la seguridad" de los peatones realizando una estructura "sólida y adecuada".
En el momento de la visita, el consejero ha estado acompañado por los alcaldes de ambos municipios, José Antonio González Linares y Josefa González, respectivamente, quienes han agradecido la disposición de la Consejería por buscar una solución "rápida y eficaz" para los vecinos de la zona, y por cumplir con el compromiso que se adquirió con los dos ayuntamientos.
Durante el acto también han estado presentes el director general de Obras Públicas, José Luis Gochicoa, técnicos de la Consejería y miembros de la Corporación municipal de ambos municipios.
Nueva estructura
Para que la nueva infraestructura, situada en la CA-170 (Corrales de Buelna), pueda contar con las totales garantía de seguridad se está llevando a cabo la sustitución del antiguo puente por uno nuevo de 60 metros de longitud y dos carriles con una anchura 3,25 metros cada uno, que incluyen también dos aceras de más de 2 metros a cada lado.
En total, serán 12 metros de plataforma para agilizar el tráfico en un punto que sufre a diario un tráfico muy elevado, donde se incluyen un elevado número de vehículos pesados debido a la conexión con los polígonos industriales de Barros y de la recta de La Agüera.
El proyecto también incluye nueva señalización vertical y horizontal de la carretera, reponiéndose todos los cierres de aquellas parcelas que se hayan visto afectadas por las obras.
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