El concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines, José Luis Urraca, ha informado esta mañana del emplazamiento del que será el primer parque para el esparcimiento de perros en la ciudad de Torrelavega. Será, como ha anunciado, en la confluencia de la calle Santa María de Jesús –vía por la que se accede al Convento de las Carmelitas- y el Bulevar Ronda, en el barrio de Sierrapando.
Se trata de un espacio de 1.000 metros cuadrados, que como ha detallado el edil contará con diversas dotaciones, como vallado perimetral de metro y medio de altura, zona de bancos con zona de sombra para los dueños, bebedero para los perros y kioscanes, los dispensadores de bolsas para la recogida de excrementos, así como contenedor para el depósito de los mismos.
El parque, que contará con el mantenimiento de SERCA, tendrá un coste inferior a los 12.000 euros, como ha explicado el responsable del área de Parques y Jardines, y estará abierto los 365 días del año.
Para acceder al parque se establecerán una serie de normas de obligado cumplimiento, que estarán reflejadas en paneles informativos a la entrada del mismo y que están aún por determinar. Medidas de seguridad e higiene, entre las que se encontrarán el obligado acompañamiento de los perros por parte de sus dueños, la obligación de recoger los excrementos, la necesaria identificación de los animales, y su perfecta vacunación y estado de salud, para evitar problemas entre los perros.
Urraca ha asegurado que “por sus características”, la finca se ajusta perfectamente a las necesidades que requiere un espacio para el esparcimiento de canes. Además, ha añadido, es un “lugar próximo al centro de la ciudad”, por la que transitan muchos ciudadanos a lo largo del día, muchos de ellos con perros, y donde está proyectado que en el futuro se desarrolle el parque de Miravalles.
Se trata de un espacio de 1.000 metros cuadrados, que como ha detallado el edil contará con diversas dotaciones, como vallado perimetral de metro y medio de altura, zona de bancos con zona de sombra para los dueños, bebedero para los perros y kioscanes, los dispensadores de bolsas para la recogida de excrementos, así como contenedor para el depósito de los mismos.
El parque, que contará con el mantenimiento de SERCA, tendrá un coste inferior a los 12.000 euros, como ha explicado el responsable del área de Parques y Jardines, y estará abierto los 365 días del año.
Para acceder al parque se establecerán una serie de normas de obligado cumplimiento, que estarán reflejadas en paneles informativos a la entrada del mismo y que están aún por determinar. Medidas de seguridad e higiene, entre las que se encontrarán el obligado acompañamiento de los perros por parte de sus dueños, la obligación de recoger los excrementos, la necesaria identificación de los animales, y su perfecta vacunación y estado de salud, para evitar problemas entre los perros.
Urraca ha asegurado que “por sus características”, la finca se ajusta perfectamente a las necesidades que requiere un espacio para el esparcimiento de canes. Además, ha añadido, es un “lugar próximo al centro de la ciudad”, por la que transitan muchos ciudadanos a lo largo del día, muchos de ellos con perros, y donde está proyectado que en el futuro se desarrolle el parque de Miravalles.
De esta manera, ha dicho, se da respuesta a “una necesidad que en diversas ocasiones se ha transmitido al Ayuntamiento” y que servirá de “experiencia piloto” para otros emplazamientos que se desarrollen a lo largo de la legislatura.
Finalmente, el concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines, ha detallado que en los próximos días se encargará el proyecto para desarrollar la obra, que posteriormente ha de contar con el premiso de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico debido a la cercanía del arroyo de Tronquerías. Una vez se tramite y licite el proyecto, se podrán estimar las fechas en las que pueda estar en funcionamiento, aunque se espera que sea “antes de que finalice el año”, ha concluido Urraca.
Finalmente, el concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines, ha detallado que en los próximos días se encargará el proyecto para desarrollar la obra, que posteriormente ha de contar con el premiso de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico debido a la cercanía del arroyo de Tronquerías. Una vez se tramite y licite el proyecto, se podrán estimar las fechas en las que pueda estar en funcionamiento, aunque se espera que sea “antes de que finalice el año”, ha concluido Urraca.
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