Así lo ha trasladado hoy a los medios de comunicación el alcalde, José Manuel Cruz Viadero, tras la reunión que ha mantenido esta mañana con el delegado del Gobierno, Samuel Ruiz y en la que también han participado los concejales de Seguridad y Personal, José Luis Urraca y Pedro Pérez Noriega, el Jefe Superior de la Policía Nacional en Cantabria, Jaime Velayos, el Jefe de la Policía Nacional en Torrelavega, Víctor Revuelta y el Jefe de la Policía Local, Alejandro García.
Según Cruz Viadero, se ha informado del asunto a los sindicatos y al Jefe de la Policía Local y se ha decidido, que durante estos últimos dos meses que faltan para acabar de 2015, se lleve a cabo una “pequeña” reducción del número de agentes que forman el dispositivo “fijo” que presta este servicio pasando el equipo de los viernes noche de 4 a 3 efectivos y el de los sábados de 5 a 4.
En cuanto a los motivos de esta decisión, ha explicado que se debe a que el número de horas de disponibilidad “ya están agotadas” y que de mantenerse el número de efectivos actual se superaría el importe en horas extraordinarias presupuestado. A esto se une, ha recalcado, que existen informes de los técnicos municipales en los que se dice que no se pueden pagar esas horas extraordinarias.
Sin embargo, el alcalde ha insistido en que pese a esta reducción “la seguridad de la zona de vinos está asegurada” y ha confirmado que la Policía Nacional colaborará “en todo momento” con la Policía Local para garantizar dicha seguridad, unas veces, ha señalado, cuando así “se les requiera” y otras con presencia “en algunos momentos”.
En cuanto a otros temas tratados en la reunión, a la vista de los datos recogidos en los primeros ocho meses del año de lo que llevamos de año, Cruz Viadero y Ruiz han vuelto a afirmar que “Torrelavega es una de las ciudades más seguras de España” con una tasa de criminalidad “muy por debajo de la media nacional” (del 28,7 por mil, frente al 43,8 de la media nacional), y en la que no hay “ninguna zona del municipio que destaque por ser más insegura”.
Según han explicado el alcalde y el Delegado del Gobierno, y en relación al mismo periodo de 2015, las cifras de delitos y faltas “son similares”, y donde se ha producido un “ligero” incremento es en los hurtos que han pasado de 350 a 390 debido, principalmente, al hurto de teléfonos móviles. En cuanto al número de detenidos, 336, se ha producido un aumento del 40%.
Por último, tanto el alcalde como el Delegado del Gobierno han mostrado su “satisfacción” por la colaboración que existe entre ambas administraciones en el ámbito de la seguridad, y se han comprometido a mantener estos encuentros periódicos para seguir analizando la evolución.
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