La Unión (LU) denunció que la reforma fiscal efectuada sobre el Impuesto Sobre la Renta de las Personas Físicas, de aplicación a partir del año que viene “es especialmente inútil para el ciudadano de Cantabria”, ya que este impuesto “sólo es un 30% del esfuerzo fiscal del ciudadano para sostener la Autonomía de Cantabria”.
El Presidente de la formación política, Rafael Sebrango, señaló al respecto que la fiscalidad que sufre el ciudadano de Cantabria “está diseñada para sacrificar intensamente a la clase media”.
Tomando los datos de ingresos, tal y como el propio Gobierno Regional de Cantabria los hace constar, en el Presupuesto de Cantabria, del IRPF, nuestra Autonomía conseguirá, en el presente año 2014, unos ingresos de 437.570.000 euros, mientras que por el resto de impuestos, obtendrá 902.326.491 euros.
Por ello, “el peso del IRPF, para un ciudadano de Cantabria, sólo es el 32,66 % de su esfuerzo fiscal para sostener su Autonomía”.
“Si el IRPF es el impuesto más justo, porque depende del nivel de ingresos del ciudadano”, señaló Sebrango, “y el resto es una tabla rasa que pagan por igual todos los ciudadanos” concluyó “es obvio que en Cantabria estamos ante un sistema fiscal absolutamente injusto”.
“Rebajar el IRPF para el año electoral 2015”, añadió “es la mayor muestra de que nuestros Gobiernos son unos trileros”.
El resto de impuestos, con los que “los ciudadanos sostenemos las instituciones de Cantabria”, matizó, se componen principalmente del IVA (374.160.000 euros), y los impuestos sobre determinados consumos, como los Hidrocarburos, la Cerveza, el Tabaco, el Alcohol (281.497.244 euros).
Les siguen por orden de importancia, el Impuesto de Transmisiones y Actos Jurídicos Documentados, que juntos, recaudan 73.217.363 euros.
Cerca del anterior impuesto se sitúa el de Sucesiones, que junto con el de Patrimonio, recaudan para el Gobierno de Cantabria 63.341.373 euros.
Luego, en orden de importancia de recaudación, se sitúan los que el Presupuesto de Cantabria rubrica como Otros Impuestos Indirectos que recaudan 40.024.738 euros, que engloban los relativos al Juego, Bingos, etc, y en el que destaca por su importancia 25.230.478 euros, el Canon de Saneamiento.
Las Tasas que cobra el Gobierno Regional cobra al ciudadano por todo tipo de trámites burocráticos, licencias, permisos, etc, ascienden a 36.711.360 euros, y los precios públicos suman 23.824.413 euros.
Finalmente, el Gobierno recauda 10.550.000 euros, por otra serie de prestaciones de servicios, como las estancias en hospitales no cubiertas por la Seguridad Social.
En resumen, 902.326.491 euros son recaudados por el Gobierno Regional por impuestos al margen del IRPF, que suma 4.7.570.000 euros, es decir, sólo el 32% del total.
Para La Unión (LU) la conclusión es terminante “sólo la tercera parte de nuestro sacrificio fiscal depende de nuestro nivel de renta”, mientras que “tres cuartas partes se recaudan de manera igualitaria entre ricos y pobres”.
Por ello, tildan la reforma fiscal acordada por el Gobierno de la Nación, “como un simple truco electoral”.
Finalmente, instaron al Gobierno Regional de Cantabria a que acometa una reforma fiscal de los impuestos de que se nutre la Autonomía “equitativa con la capacidad económica de cada ciudadano”, y alertó de que “es imprescindible empezar a respetar a las clases medias”, y dejar de someterlas “al sacrificio fiscal excepcional”.
“Las clases medias son las que pueden sacar a Cantabria adelante, y las que pueden crear empleo”, remataron “si sólo son vistas como población a exprimir, Cantabria jamás se recuperará”.
El Presidente de la formación política, Rafael Sebrango, señaló al respecto que la fiscalidad que sufre el ciudadano de Cantabria “está diseñada para sacrificar intensamente a la clase media”.
Tomando los datos de ingresos, tal y como el propio Gobierno Regional de Cantabria los hace constar, en el Presupuesto de Cantabria, del IRPF, nuestra Autonomía conseguirá, en el presente año 2014, unos ingresos de 437.570.000 euros, mientras que por el resto de impuestos, obtendrá 902.326.491 euros.
Por ello, “el peso del IRPF, para un ciudadano de Cantabria, sólo es el 32,66 % de su esfuerzo fiscal para sostener su Autonomía”.
“Si el IRPF es el impuesto más justo, porque depende del nivel de ingresos del ciudadano”, señaló Sebrango, “y el resto es una tabla rasa que pagan por igual todos los ciudadanos” concluyó “es obvio que en Cantabria estamos ante un sistema fiscal absolutamente injusto”.
“Rebajar el IRPF para el año electoral 2015”, añadió “es la mayor muestra de que nuestros Gobiernos son unos trileros”.
El resto de impuestos, con los que “los ciudadanos sostenemos las instituciones de Cantabria”, matizó, se componen principalmente del IVA (374.160.000 euros), y los impuestos sobre determinados consumos, como los Hidrocarburos, la Cerveza, el Tabaco, el Alcohol (281.497.244 euros).
Les siguen por orden de importancia, el Impuesto de Transmisiones y Actos Jurídicos Documentados, que juntos, recaudan 73.217.363 euros.
Cerca del anterior impuesto se sitúa el de Sucesiones, que junto con el de Patrimonio, recaudan para el Gobierno de Cantabria 63.341.373 euros.
Luego, en orden de importancia de recaudación, se sitúan los que el Presupuesto de Cantabria rubrica como Otros Impuestos Indirectos que recaudan 40.024.738 euros, que engloban los relativos al Juego, Bingos, etc, y en el que destaca por su importancia 25.230.478 euros, el Canon de Saneamiento.
Las Tasas que cobra el Gobierno Regional cobra al ciudadano por todo tipo de trámites burocráticos, licencias, permisos, etc, ascienden a 36.711.360 euros, y los precios públicos suman 23.824.413 euros.
Finalmente, el Gobierno recauda 10.550.000 euros, por otra serie de prestaciones de servicios, como las estancias en hospitales no cubiertas por la Seguridad Social.
En resumen, 902.326.491 euros son recaudados por el Gobierno Regional por impuestos al margen del IRPF, que suma 4.7.570.000 euros, es decir, sólo el 32% del total.
Para La Unión (LU) la conclusión es terminante “sólo la tercera parte de nuestro sacrificio fiscal depende de nuestro nivel de renta”, mientras que “tres cuartas partes se recaudan de manera igualitaria entre ricos y pobres”.
Por ello, tildan la reforma fiscal acordada por el Gobierno de la Nación, “como un simple truco electoral”.
Finalmente, instaron al Gobierno Regional de Cantabria a que acometa una reforma fiscal de los impuestos de que se nutre la Autonomía “equitativa con la capacidad económica de cada ciudadano”, y alertó de que “es imprescindible empezar a respetar a las clases medias”, y dejar de someterlas “al sacrificio fiscal excepcional”.
“Las clases medias son las que pueden sacar a Cantabria adelante, y las que pueden crear empleo”, remataron “si sólo son vistas como población a exprimir, Cantabria jamás se recuperará”.
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