CGT, Ecologistas en Acción Cantabria e Interpueblos convocan mañana una charla informativa sobre el Tratado de Libre Comercio entre EEUU - UE (TTIP) que tendrá lugar el Instituto Santa Clara de Santander a las 19:30, donde se dará respuestas a cuestiones cómo: ¿Qué esconde el Tratado Comercial Transatlántico entre los EE.UU. y la Unión Europea?. ¿A quién interesa?. ¿Qué intereses saldrían beneficiados y perjudicados por ese tratado comercial?. ¿A qué modelo productivo responde?. ¿Cuáles serían sus efectos sobre los Servicios Públicos y la Contratación Pública, o sobre la agricultura y el medio ambiente?. ¿Cuáles sobre los derechos laborales, la privacidad digital y la propiedad intelectual?. ¿Podrá algún país europeo prohibir la fractura hidráulica o la carne hormonada?. ¿Qué sucederá con los cultivos transgénicos prohibidos en algunos países europeos?.¿Qué pasará con los medicamentos genéricos? y ¿Tendrán l@s trabajador@s derecho a organizarse en las empresas.
Según los convocantes, este tratado comercial se viene negociando en secreto desde junio 2013 y supone posiblemente la mayor cesión de soberanía de los estados en favor de las grandes corporaciones trasnacionales así como uno de los mayores ataques a los principios más básicos de la democracia.
Sin embargo los grandes grupos empresariales, que trabajan mano a mano con la Comisión Europea, han tenido la oportunidad de tener acceso privilegiado a los documentos secretos e influenciar en las negociaciones. Estos grupos del lobby industrial y financiero se han marcado el objetivo de conseguir la llamada “cooperación reguladora”, que permitiría su participación directa en los procesos de redacción de normativas y legislación.
En cuanto a las repercusiones del mismo se verán afectados aspectos básicos y cotidianos de orden social, ambiental y económico. A pesar de su trascendencia, su negociación se está desarrollando en un clima de secretismo y opacidad evitando que transcienda los posibles efectos prácticos del mismo, ni siquiera durante la campaña a las elecciones al Parlamento Europeo ha habido el más mínimo debate político respecto a este Tratado, sobre el cual los grandes grupos políticos han pasado de hurtadillas.
Según los convocantes, este tratado comercial se viene negociando en secreto desde junio 2013 y supone posiblemente la mayor cesión de soberanía de los estados en favor de las grandes corporaciones trasnacionales así como uno de los mayores ataques a los principios más básicos de la democracia.
Sin embargo los grandes grupos empresariales, que trabajan mano a mano con la Comisión Europea, han tenido la oportunidad de tener acceso privilegiado a los documentos secretos e influenciar en las negociaciones. Estos grupos del lobby industrial y financiero se han marcado el objetivo de conseguir la llamada “cooperación reguladora”, que permitiría su participación directa en los procesos de redacción de normativas y legislación.
En cuanto a las repercusiones del mismo se verán afectados aspectos básicos y cotidianos de orden social, ambiental y económico. A pesar de su trascendencia, su negociación se está desarrollando en un clima de secretismo y opacidad evitando que transcienda los posibles efectos prácticos del mismo, ni siquiera durante la campaña a las elecciones al Parlamento Europeo ha habido el más mínimo debate político respecto a este Tratado, sobre el cual los grandes grupos políticos han pasado de hurtadillas.
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