Torrelavega: La ciudad renovó su hermanamiento con la localidad francesa de Rochefort Sur Mer 35 años después

Un grupo de vecinos de Torrelavega pertenecientes a la Asociación de Hermanamiento viajaron del 14 al 18 de septiembre pasado a Rochefort Sur Mer, ciudad francesa hermanada con Torrelavega, desde hace 35 años.
Con este viaje el grupo quiso renovar la amistad surgida en 1.982 entre ambas ciudades, que se materializó simbólicamente con la plantación de un tejo entre los alcaldes de esa época, Manuel Teira y Frot.
Han sido 35 años de visitas y de intercambios entre colectivos del deporte, de la cultura, de la educación y, esencialmente, de ciudadanos que hoy en día son amigos.
La treintena de ciudadanos de la ciudad fueron recibidos en los hogares de los franceses o en el hotel para profundizar en el conocimiento y amistad que une a las dos ciudades.
El programa se inició con la visita guiada por la historia de la ciudad, la pasada y la presente y posteriormente, el grupo torrelaveguense fue recibido en el Ayuntamiento por el alcalde, el  Hervé Blanché y los tenientes de alcalde. Carolina Campoadarve-Puente y el  Bernard Dubourg, que volvieron a firmar el pacto de amistad que une a las dos ciudades 35 años después.
En el acto, el vicepresidente de la Asociación de Hermanamientos de Torrelavega, Jesús Sancio, agradeció la acogida dispensada por los franceses e invitó a las autoridades a renovar las relaciones entre los dos equipos de gobierno.
El sábado 16 de septiembre el grupo se trasladó a la isla Aix, ligado a los últimos días de el emperador Napoleón Bonaparte antes de ir a la islas de Santa Elena y visitaron el Museo del Nácar. El domingo el grupo torrelaveguense disfrutó con las familias de acogida y de la Jornada del Patrimonio Europeo, en su 34 edición.
Según Sancio, "el Hermanamiento, 35 años después, está vivo, pero necesita una renovación. Necesita que reinventemos el proyecto surgido después de la Segunda Guerra mundial con el objetivo de aportar a la población europea lazos de unión mayores y promover proyectos de beneficio mutuo”.
"En este último punto es donde tenemos que reinventarnos para llevar a cabo proyectos culturales, sociales o económicos que beneficien a los ciudadanos y en el cual se deberían implicar los ciudadanos, las asociaciones y las empresas".

En este sentido, Sancio recordó como al principio de los años ochenta,  la Joven Cámara de Torrelavega tomó la iniciativa en muchos proyectos, entre ellos el Hermanamiento, y dinamizó la vida cultural, social y económica de nuestra ciudad.